Tonya Rushing, ex jefa ejecutiva de Endoscopy Center of Southern Nevada en Las Vegas, clínica vinculada a un brote de hepatitis C en el 2007, ha sido condenada a un año y un día en una prisión federal tras declararse culpable de conspiración para cometer fraude de atención médica.
Rushing se disculpó el pasado lunes 5 con Larry Hicks, juez superior de distrito de los Estados Unidos, quien también la sentenció a dos años de libertad supervisada después de cumplir su sentencia y le ordenó llevar a cabo 150 horas de servicio comunitario.
Rushing, de 47 años, también fue condenada a pagar una multa de 10 mil dólares, 50 mil más en restitución y perderá unos 8.1 millones, dijo Daniel Bogden, fiscal federal.
25 cargos fueron desestimados como parte de un acuerdo con la fiscalía alcanzado antes de que Rushing se declarara culpable en julio pasado. Ella podría haber enfrentado hasta cinco años de prisión y una multa de 250 mil dólares.
El abogado Draskovich señaló el pasado martes 6, que Rushing cooperó con el gobierno y testificó en un procesamiento por el daño a un paciente, de Dipak Kantilal Desai, ex médico y propietario de la clínica.
Desai, de 65 años de edad, fue una vez un médico prominente y miembro de la Nevada State Board of Medical Examiners, que se jactaba de la eficiencia de sus clínicas, deberá cumplir una sentencia de 18 años a cadena perpetua en la prisión estatal tras ser declarado culpable en el juicio por asesinato y otros cargos en un brote de hepatitis considerado como uno de los más grandes de los Estados Unidos.
Desai se declaró culpable el mes pasado en el juicio por cargos federales de fraude de atención médica y conspiración. Será sentenciado el próximo 9 de julio en el caso federal. (AP)
