Por Ken THOMAS y Julie PACE
Algunas interrogantes sobre el uso de Hillary Rodham Clinton de una cuenta personal de correo electrónico personal durante el tiempo que fue secretaria de Estado no han quedado resueltas con su conferencia de prensa sobre el tema, en momentos que se prepara para una posible campaña presidencial.
Clinton admitió el martes 10 que debió haber usado una dirección de correo del gobierno y algunos demócratas se declararon satisfechos con su explicación. En cambio, los legisladores federales republicanos tienen planes de citarla ante una comisión de la Cámara de Representantes para interrogarla sobe el uso de la cuenta privada y determinar si este asunto tiene alguna relación con el mortal ataque a personal diplomático estadounidense en Bengasi, Libia, en 2012.
El miércoles 11, The Associated Press presentó una demanda contra el Departamento de Estado para forzar la entrega de correspondencia de correo electrónico y documentos del gobierno durante su desempeño como secretaria de estado.
La demanda, que sucede a solicitudes en amparo de la Ley de Libertad de Información que no fueron respondidas, busca material relacionado con la agenda pública y privada de Clinton, correspondencia con asistentes suyos que probablemente participarán en su anticipada campaña, y mensajes sobre el ataque a Osama bin Laden y las prácticas de la Agencia de Seguridad Nacional.
El interés en los correos de Clinton ha complicado lo que se anticipaba como una tranquila puesta en marcha de su campaña presidencial el mes próximo. Clinton había planeado pasar el mes de marzo promoviendo su trabajo en pos de la igualdad de la mujer, una cuestión clave para alguien que pretende ser la primera presidenta de Estados Unidos.
Sin embargo, las preguntas sobre el correo electrónico de Clinton han dominado sus actividades en la semana pasada, después que se reveló que usó una cuenta personal de correo electrónico en el Departamento de Estado y que lo hizo por medio de un servidor privado, apartándose de la norma para los altos funcionarios.
En una conferencia de prensa el martes 10, Clinton prometió que todos sus correos relacionados con su desempeño serán hechos públicos “para que todos los vean”. Pero también admitió que borró mensajes relacionados con su vida privada. Rechazó las exhortaciones republicanas de entregar el servidor del correo a un revisor independiente.
Algunos demócratas dijeron que la conferencia de prensa no significa el final de la cuestión.
“Esto es algo que será discutido hasta que el Departamento de Estado entregue los correos”, conjeturó Boyd Brown, miembro del Comité Nacional Demócrata. “Después los republicanos en la Cámara de Representantes los revisarán, y después eso llegará a un comité de investigador. La gente va a estar cansada de Clinton y eso es lo que pretenden los republicanos, que el público se canse de oír acerca de Hillary Clinton”. WASHINGTON (AP)