Hija de José María Sarmiento, quien llegara a Estados Unidos como la mayoría de mexicanos, indocumentado, su madre Josefina Gallo, ambos de León, Guanajuato, es Columba un extraordinario ejemplo de tenacidad y dedicación, como muchos que Donald Trump no entiende, viene a complementar, a enriquecer esta gran nación.
Columba conoció a Jeb Bush en los años 70, otra historia más de amor sin barreras, sin distingos de etnias, a los 16 años se conectaron emocionalmente, continúan su matrimonio aunque hoy está en la atención nacional, pues Jeb Bush busca la presidencia y de lograrse ella sería la Primera Dama. Una de esas historias increíbles de película, digna de considerarse y seguir con atención.
Jeb Bush, republicano, es un buen candidato, moderado, con extraordinario curriculum, un ex gobernador de Florida, y ella ya dio un buen papel como Primera Dama.
Leí que a la señora Columba no le interesan los reflectores, ha sido una ama de casa creando una familia de bien, sin embargo, apoya a Jeb para presidente, bilingüe, bi cultural, con experiencia de haber sido y vivido en carne propia el fenómeno social de un migrante sin documentos, el esfuerzo de estudiar y conocer de cerca el problema social de México, será para este servidor un gusto además de razonadamente considerar a Jeb Bush el más apto para gobernar a Estados Unidos, dar y recomendar a esta familia para ocupar la Casa Blanca.
Me participó Fernando Romero, de Hispanics In Politics, la positiva experiencia de estar con Columba allá en la casa de Michoacán, Lindo Michoacán de la Honorable Familia Barajas, donde mi tocayo, Javier y su hija recibieron a Columba con un grupo de hispanos que disfrutaron de la plática que Columba ofreció, su sencillez y empatía con nuestra cultura es obvia, más aun su labor social entre los nuestros es evidente como su pasión de luchar contra adicciones, rehabilitando miles de jóvenes.
Mandamos una señal de que una Primera Dama con la convicción y visión de Columba Bush, de León, Guanajuato, México, hoy en día puede ser la gran diferencia de llevar tanta promesa de palabra a realidad.
Nuestro saludo respetuoso a Columba y así mismo nuestro modesto apoyo a cambio, a cambio de que sea recíproca cuando llegue con los nuestros.
Xavier@rivas.com ¡Ánimo!
