Los meteorólogos de EEUU continúan vigilando dos sistemas que podrían convertirse en los próximos días en sendas depresiones tropicales y de esta forma acabar con casi dos meses de calma en el Atlántico.
El Centro Nacional de Huracanes de EEUU (NHC, por sus siglas en inglés) vigila dos áreas de baja presión en el Atlántico, una de ellas con un 60 % de posibilidades de convertirse en una depresión tropical en las próximas 48 horas, según divulgó en un boletín este martes.
El NHC alertó que una área de baja presión ubicada a cientos de millas al este de las Antillas Menores, en el centro de la cuenca atlántica, produce por ahora solo lluvias y tormentas, pero se prevé un desarrollo gradual y que "se forme una depresión tropical dentro de los próximos días".
Los meteorólogos pronostican que el sistema se mueva lentamente con dirección oeste-noroeste, rumbo a "las aguas adyacentes del norte de las Islas de Sotavento", que incluyen las islas vírgenes estadounidenses y británicas, Guadalupe, Dominica, Martinica, Barbados y San Vicente y las Granadinas, entre otras.
Por otro lado, una onda tropical acompañada de una amplia zona de baja presión ubicada justo en frente de la costa oeste de África "podría convertirse en una depresión tropical de corta duración sobre el extremo este del Atlántico durante los próximos dos días", informó hoy el NHC.
El centro meteorológico, con sede en Miami (Florida), vaticina que hacia fines de semana el sistema se debilite cuando se mueva por aguas frías, no obstante arrojará fuertes lluvias en zonas de las islas africanas de Cabo Verde.
Asimismo, en el norte del Atlántico central y a unas 850 millas al oeste-suroeste de las islas Azores ha surgido otra zona de baja presión que presenta un 60 % de probabilidades de convertirse en una depresión tropical en las próximas 48 horas.
La actual temporada de huracanes en el Atlántico, que se inició el 1 de junio, se acerca al pico de actividad, usualmente a partir de septiembre, con solo tres tormentas formadas hasta la fecha, Alex, Bonnie y Colin lal última disipada el pasado 3 de julio.
No se ha formado por el momento ningún huracán en lo que va de temporada, para la cual la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés) de EE.UU. ha previsto una actividad por encima del promedio. Miami (EFE)