La marca de automóviles Rolls Royce (RR) es sinónimo de lujo y exclusividad, debido a que su planta en Goodwood, Inglaterra, respeta la destreza original de sus fundadores Henry Royce y Charles Rolls combinada con alta tecnología de punta.
En la planta automotriz se manufacturan los cinco modelos: Phantom, Dawn, Wraith, Ghost, y la nueva camioneta Cullinan en una sola línea de producción.
El guía del recorrido por la planta, David Deane, muestra entusiasta que los modelos están hechos a mano y no se usan robots en su proceso de fabricación.
“Únicamente se usan robots para pintar la carrocería de los autos, todo lo demás es ensamblado a mano”, enfatizó Deane.
Tal vez ello explica el por qué producir algunos modelos se lleva un año, ya que se realizan con una perfección milimétrica en acabados interiores y exteriores.
Los exclusivos clientes pueden escoger entre 44 mil colores existentes, o crear su propia tonalidad como es el caso del color “lápiz labial rojo”, o el tono bugambilia inspirado en una flor que recolectó uno de lo clientes en Pebble Beach, California.
Un cliente escogió un acabado con concha de nácar que requirió de 14 capas de pintura, recuerda Deane, mientras que otro cliente pidió decorar su automóvil con mil diamantes incrustados y cubierto en una capa de oro líquido.
En otra ocasión, un auto requirió 22 capas de pintura por lo que algunos vehículos se quedan a veces una semana en el área destinada a la pintura.
Los logos son pintados a mano por el artista Mark Court, que tiene que satisfacer el gusto de los clientes que optan por figuras de tigres asiáticos, motivos árabes o chinos.
Tal vez por ello se explica que el lema de la marca es: “El único límite es tu imaginación”, ya que los automóviles son creados al gusto del cliente.
La planta de Goodwood fue inaugurada el 1 de enero de 2003, en una superficie de 17 hectáreas en Sussex, a 100 kilómetros al oeste de Londres, y cerca de la pista privada de carreras de Goodwood donde cada año se realiza el “Festival de la Velocidad”.
La planta tiene más de mil 700 empleados y produce en promedio 20 autos al día en turnos de lunes a viernes.
La automotriz tiene un programa de formación para jóvenes que aprenden el arte de ensamblar a mano cada uno de los vehículos.
Las pieles para los interiores provienen de las vacas que pastan libremente en las montañas suizas y que no tienen ningún tipo de rasguños o heridas que muchas veces provocan las cercas metálicas o los alambres de púas.
“Un auto puede utilizar hasta 487 piezas de piel del mismo rebaño”, explicó Deane, y los sobrantes son enviados a las altas casas de moda para la producción de accesorios como llaveros o carteras.
Para los clientes con gustos exóticos algunos autos pueden ser decorados con piel de cocodrilo o avestruz, y cada vehículo utiliza un árbol completo para elaborar los lujosos tableros de madera y otros acabados interiores.
El nuevo Phantom VIII tiene un precio inicial de 450 mil dólares, y es el segundo modelo Phantom que lanza la Rolls Royce, desde que fue adquirida por la BMW en 1998.
“Manejarlo es como volar en una alfombra mágica. Este es el Phantom más reciente y es un auto muy distinto al previo. Es un auto para conducir, más manejable en la ciudad y la aceleración es fenomenal”, señaló David Cooledge a Notimex, chofer de la compañía RR desde hace 12 años, durante los cuales ha manejado todos los modelos.
La reina Isabel II posee un Phantom y lo utiliza en ocasiones especiales como la boda del príncipe Guillermo y Catalina en 2011.
El exbeatle John Lennon adquirió un Phantom V en 1965, cuando el "Cuarteto de Liverpool" estaba en la cúspide de su carrera y después lo mandó pintar en color amarillo y motivos psicodélicos del álbum Sargento Pimienta.
Los autos RR se venden en todo el mundo, en particular en China y Estados Unidos. En la Ciudad de México existe un distribuidor desde 2003, año en que fue inaugurada la planta de Goodwood y la marca fue relanzada.
El director de Comunicación de RR Estados Unidos, Gerry Spahn, dijo a Notimex que “los mexicanos propietarios de RR han sido coleccionistas apasionados”.
El tiempo de espera para un vehículo RR es de unos tres meses, pero puede ser más para los automóviles hechos al gusto del cliente.
Por ejemplo, un auto que será entregado en Pebble Beach, California, tomó 12 meses diseñarlo entre el equipo de RR y el propietario.
El Phantom es el auto que tiene el tiempo de espera más largo. Se caracteriza por sus grandes dimensiones y un techo estrellado con mil 900 luces de fibra óptica que son cortadas a mano, tal y como se constató durante una visita a la fábrica.
El tiempo de espera para la camioneta SUV o todoterreno Cullinan, que fue lanzada este año en esta ciudad, es de entre seis y 12 meses.
En 2017, Rolls Royce vendió tres mil 362 autos (649 menos que en 2016) y se espera que con la Cullinan -nombre del diamante en bruto más grande del mundo- repunten las ventas de la automotriz.
La marca RR cumple 114 años desde que sus fundadores se asociaron para crear el primer modelo que fue expuesto en el salón de París en 1904, el Rolls Royce 10 hp.
La asociación duró sólo seis años debido a la muerte prematura de Charles Rolls, a los 32 años de edad, ocurrida en un aeroplano el 12 de julio de 1910, el primer británico en fallecer en un accidente aéreo.
Sin embargo, a pesar de los vaivenes la marca prevalece bajo la máxima premisa de Royce: “Lucha por la perfección en todo lo que hagas”. Goodwood (NOTIMEX)