Polaris, organización líder en la lucha global para erradicar la esclavitud moderna y restaurar la libertad de los sobrevivientes, publicó hoy un informe que deja al descubierto la economía sexual clandestina que opera en bares y cantinas en los Estados Unidos y explota a mujeres y niñas provenientes de América Latina. El informe, titulado Más que bebidas a la venta: Desvelando las redes de trata sexual en bares y cantinas estadounidenses describe la forma en que estas casas de cita con fachada comercial continúan operando sin ningún control, bajo la apariencia de bares o clubes nocturnos comunes. Mientras tanto, sus víctimas se encuentran atrapadas en una industria caracterizada por unos niveles inimaginables de violencia y explotación.
Entre diciembre 2007 y marzo 2016, Polaris identificó a 1,300 víctimas posibles de casos relacionados con cantinas en 20 estados de EE. UU. y Puerto Rico a través de la operación de la línea de acceso directo del Centro Nacional de Recursos para la Trata de Personas y de la línea de mensajes de texto BeFree. Durante el mismo período, los esfuerzos para combatir la trata de personas en establecimientos tipo cantina se limitaron a unos pocos casos federales emblemáticos que se persiguieron en Houston.
Engañadas y seducidas con falsas promesas de buenos empleos, amor o una vida mejor, las víctimas son convencidas para trasladarse a los Estados Unidos y posteriormente forzadas a vender sexo. Poderosas redes criminales y tratantes independientes utilizan amenazas, violencia física, abuso sexual y otros medios severos de abuso para controlar a sus víctimas. Asimismo, el informe revela que, frecuentemente, los oficiales policiales y de inmigración pasan por alto los signos de trata en cantinas – y por ende una oportunidad crucial para ayudar a las víctimas a escapar.
“Todos los días en Estados Unidos, mujeres y niñas se ven atrapadas en redes criminales que venden sexo en bares y cantinas delante de nuestras narices,” declaró Bradley Myles, director ejecutivo de Polaris. “Si queremos frenar la victimización de mujeres latinas que se registra en estos establecimientos altamente abusivos, tenemos que cambiar la ecuación para los tratantes, desmantelando su modelo de negocio y haciendo que el delito sea de alto riesgo y que genere pocas ganancias.”
“Las comunidades solidarizan cuando llegan a entender la terrible explotación que sufren las víctimas de trata sexual en cantinas – pero necesitan estar equipadas para saber cómo responder,” subrayó My Lo Cook, directora de la Iniciativa Estratégica, México, de Polaris. “Los oficiales policiales necesitan capacitación y recursos para poder identificar más víctimas y perseguir casos de manera efectiva. Al mismo tiempo, los proveedores de servicios deben estar equipados para responder al complejo trauma que han vivido estas sobrevivientes de una forma que respete su contexto cultural y lingüístico único.”
Más que bebidas a la venta se basa en datos obtenidos de las interacciones de Polaris con individuos que se ponen en contacto con la línea de acceso directo del Centro Nacional de Recursos para la Trata de Personas (NHTRC) y con la línea de mensajes de texto BeFree. El informe examina varios modelos de negocio específicos utilizados para la trata sexual en cantinas. A continuación algunos de los hallazgos más importantes del informe:
¿Quiénes son las víctimas? Son mayormente mujeres jóvenes o niñas de América Latina.
- El 96% de las víctimas posibles eran mujeres o niñas, principalmente provenientes de México o América Central
- El 63% eran menores de edad. Los tratantes buscan deliberadamente a niñas.
¿Quiénes son los tratantes? Suelen ser hombres latinos pero también pueden ser ciudadanos de los Estados Unidos.
- El 67% de los tratantes eran hombres, pero cerca de un tercio eran mujeres.
- El 70% eran de origen latino y el 35% eran ciudadanos de los Estados Unidos.
Medios de control: Con frecuencia, los tratantes utilizan amenazas, abuso físico y abuso sexual para controlar a las víctimas.
- Al 62% de las víctimas, se les confinó o aisló de alguna forma.
- El 51% reportaron abuso económico – tal como la imposición de deudas abusivas o el robo de sueldos – pero la cifra real podría ser mucho más alta.
Reclutamiento: Los tratantes engañan a mujeres y niñas vulnerables que huyen de la violencia en sus países o que buscan mejores oportunidades, para que entren en situaciones violentas de trata en los Estados Unidos.
- Al 34% de las víctimas, se les reclutó mediante tácticas relativas al tráfico humano. Las víctimas no siempre son conscientes de que están migrando de forma ilegal.
- Al menos el 29% recibieron ofertas de trabajo fraudulentas y sólo descubrieron la verdadera naturaleza del trabajo después de llegar al lugar.
Puntos de Acceso: Las víctimas tienen acceso ocasional a personas y agencias que les podrían ayudar.
- El 31% de las víctimas indicaron que los compradores de sexo representaban una de las oportunidades principales para obtener ayuda.
- El 14% interactuaron con la policía o con oficiales de inmigración, pero en su mayoría, este contacto no dio como resultado su identificación como víctimas ni su rescate.
- El 19% reportaron haberse incorporado al sistema de atención sanitaria, pero la cifra real podría ser mucho más elevada.
Más que bebidas a la venta expone medidas específicas que varios actores relevantes pueden tomar para combatir la trata sexual en cantinas y bares en los Estados Unidos, así como en muchos otros lugares. Polaris hace hincapié en la necesidad urgente de una cooperación bilateral entre las agencias gubernamentales y las autoridades de procuración de justicia al igual que entre proveedores de servicios y comunidades en ambos lados de la frontera.
Para obtener ayuda o denunciar un posible caso de trata, llame al Centro Nacional de Recursos para la Trata de Personas al 1-888-373-7888 o envíe un mensaje de texto a Polaris escribiendo el texto HELP a “BeFree” (233733).