Los demócratas eligieron el sábado 25 de febrero al ex secretario del Trabajo Tom Perez como su nuevo presidente nacional, el primer hispano en ejercer este puesto tras superar a un congresista de Minnesota.
Perez se impuso al representante Keith Ellison en la segunda vuelta de la votación de los miembros del Comité Nacional Demócrata reunidos en Atlanta, con lo que llegó a su fin una divisiva campaña que reflejó la profundidad de los fracasos electorales de esa fuerza política, así como la energía de la resistencia al presidente Donald Trump.
El nuevo presidente debe reconstruir un partido que en la última década ha perdido aproximadamente mil puestos de elección popular desde la Casa Blanca al Congreso y las 50 legislaturas estatales, un retroceso que los demócratas no habían visto a nivel nacional en 90 años.
En un reconocimiento a su reducida ventaja de 35 votos de los 435 emitidos, sin mencionar la persistente fricción entre las corrientes demócratas de la vieja guardia y las nuevas promesas liberales, Pérez escogió a Ellison como presidente adjunto.
“Todos estamos juntos en esto”, declaró Pérez, hijo de inmigrantes dominicanos, al tiempo que exhortó a los demócratas a combatir “al peor presidente en la historia de Estados Unidos”.
Ellison, que tenía el apoyo de muchos liberales, entre ellos el precandidato presidencial Bernie Sanders, también hizo un llamado a la unidad y subrayó que él y Pérez habían prometido la reconstrucción del partido a nivel estatal y local en todo el país.
“No podemos darnos el lujo de abandonar esta sala divididos”, afirmó Ellison desde el escenario junto a Pérez mientras algunos partidarios jóvenes de Ellison abucheaban desde la tribuna.
Los republicanos controlan la Casa Blanca, el Congreso y 33 gobernaciones, y están a punto de lograr la mayoría conservadora en la Corte Suprema si el Senado confirma a otro magistrado de esa línea.
A pesar de los triunfos electorales personales de Barack Obama, el Partido Demócrata sufrió derrotas aplastantes al perder la mayoría en la Cámara de Representantes en 2010 y del Senado en 2014.
Trump dijo vía Twitter: “Felicidades a Thomas Pérez, que acaba de ser nombrado presidente del Comité Nacional Demócrata. ¡No podría estar más feliz por él, o por el Partido Republicano!”
Horas antes, Pérez les dijo a activistas del partido que los demócratas enfrentan una “crisis de confianza” y una “crisis de relevancia”.
Pérez participó en la contienda a pedido de Obama y su círculo de allegados. Después de la votación, el ex presidente elogió a ambos contrincantes en un comunicado.
“Sé que Tom Pérez nos unirá bajo esa bandera de la oportunidad”, declaró Obama, y que “pondrá las bases de una nueva generación de liderazgo demócrata para este Estados Unidos grande, audaz, incluyente y dinámico que tanto amamos”.
Pérez asume la presidencia demócrata con un historial liberal como abogado defensor de los derechos civiles y partidario de los sindicatos. Sin embargo, tenía la etiqueta de pertenecer a la corriente principal como residente de Maryland que estuvo durante años en la órbita de Washington, donde trabajó para el Departamento de Justicia y más recientemente en el gabinete de Obama.
El ex vicepresidente Joe Biden dio su apoyo a Pérez. Una de las colaboradoras más cercanas de Obama, Valerie Jarret, hizo llamadas a miembros del CND a favor de Perez el viernes 24 en la noche. (AP)