Por Isaí Angeles
México, 6 Ago (Notimex).- Las críticas a Donald Trump llegaron a la alta costura. También serán expuestas en un museo-taller en donde se confrontarán con posturas más abiertas y flexibles.
Un vestido de alta costura fue el vehículo elegido por el diseñador ecuatoriano-alemán Agustín Molina, para sumarse a la indignación que generan las posturas antiinmigrantes del candidato republicano a la Presidencia de Estados Unidos.
Así es que ahora traer pintada en el pecho la imagen de Trump en un vestido de alta costura será posible con la obra de Molina, quien estudió diseño de modas en Italia y perfeccionó su técnica de alta moda en Francia.
Molina critica con su diseño al político conservador al que acusa de envenenar a la sociedad “con odio, mentiras y arrogancia, sentimientos muy negativos que podemos ver reflejados en sus ojos”.
El diseñador inició en mayo pasado la elaboración del vestido y, en contrapartida, diseñó uno más con la imagen de la canciller alemana Ángela Merkel, quien ordenó recibir a miles de refugiados que huyen de países orientales.
“Cada vez que recuerdo lo deliciosa que es la comida mexicana, el ´Chavo del Ocho´ o escucho a Juan Gabriel, no puedo dormir tranquilo sabiendo que un loco con un nido de pájaros por cabello insulta a un pueblo soberano, altivo y orgulloso de sus raíces”, dijo Molina a Notimex.
Autoconsiderado un crítico de la sociedad -“inconforme pero que no hace nada para conformarse”-, Molina recién finalizó a mano los dos vestidos para exhibirlos en su taller de alta costura ubicado en Leipzig.
Trump fue pintado en la parte del pecho con una mirada fuerte, penetrante y negativa, con unos papagayos en color lila a cada lado de la cabeza y un nido de pájaros como corona.
“Donald Trump puede intentar interpretar a los latinos y mexicanos como el lado oscuro de Estados Unidos, pero eso no es cierto; por lo tanto sobre su cabeza y sobre sus ideas locas, los mexicanos construirán generación tras generación su nido, pues ellos son parte de la evolución de Estados UInidos”, explicó Molina.
Dedicado a crear vestidos de exposición con la finalidad de crear un vínculo entre la moda y el arte, Molina quiso sumarse a la indignación existente entre los latinos contra Trump, por sus posiciones de ataque a los migrantes.
“La solución no es un muro para terminar con estos problemas”, atribuidos por Trump a los migrantes, enfatizó Molina.
En contraste, el artista elaboró otra prenda con la imagen de Merkel, con una aureola sobre su cabeza y con ángeles de piel oscura a su costado en representación de los refugiados llegados en masa a Alemania.
“Merkel es un espejo pulido, donde todos debemos reflejarnos, mientras que Trump es la parte trasera del espejo (gris)”, explicó el artista sobre la pintura dedicada a la canciller alemana.
Cada vestido fue elaborado a mano con finos materiales, como seda pura y algodón producido en Italia de manera específica para Molina.
“Yo trabajo solo, me gusta que mis creaciones lleven solo mi pasión y sudor y no de asistentes”, mencionó.
Los vestidos pueden ser vistos por el público en el taller-museo de Molina en Leipzig.
Tener un vestido de esas características puede resultar costoso. Similares creaciones de Molina fueron adquiridas en unos 60 mil euros pero “los he vendido con mucho dolor del alma porque los amo con mi vida, pero tengo que sostener mi casa-museo”.