Jamás se olvidan a personas que marcan diferencia en la vida, como apreciar a personas, sobre todo mujeres valiente que por alguna causa llegan a Las Vegas, en esta ocasión usaré un ejemplo de una dama de nombre Thelma Álvarez, que como muchas más llegan a esta ciudad, ella del Distrito Federal, con educación superior, con clase y calidad humana.
A Thelma la vi luchar contra obstáculos sociales y limitaciones que tenía que superar, el cómo lograr un empleo digno, el cómo integrarse a la comunidad hispana de Nevada o de esta nación, del cómo cuidar su calidad de mujer de bien y además de enfrentar un problema de cáncer, la vi luchar de adeveras en una empresa de Bienes Raíces, en una Perfumería en empleos que le daban la oportunidad de progreso.
Thelma a diferencia de los migrantes en general, cuenta con educación universitaria de México, para fines prácticos, esto no servía de mucho pues en esta nación no son válidas las profesiones si no son acreditadas pero si es importante que al contar con esa preparación, Thelma, madre con hijos en México, le servía mucho su calidad de persona educada y su calidad de persona de bien.
Thelma hoy, ya no radica en Las Vegas, como también muchos, tuvo que cambiar de residencia, pero ella aun sigue conectada con Las Vegas, me escribió y me comparte que cada semana, donde esté, lee El Mundo; si este medio, que por cierto más que un medio de comunicación es un documento semanal de consulta para nuestra comunidad, me dice mi amiga Thelma que está informada y jamás se separa de acontecimientos de Las Vegas, me pregunta por Sergio Osorio, por Otto Mérida, por Angélica Quiroz, por la señora Victoria, por tantas personas que conforman el mosaico cultural de Nevada.
A través de Thelma Álvarez, vuelvo a reconocer a la mujer, a las damas, a las señoras que hacen en Nevada una nueva vida, reconocer como Thelma con problemas ya superados de salud, limitaciones económicas, con limitado idioma inglés, luchan, no se achican, al contrario crecen ante los retos y nos ponen el ejemplo a los hombres de que al final son más fuertes que uno.
Sentimos admiración a quien nos da vida, quien como Águila lucha por sus hijos, quien hace rendir el dinero, quienes salen al frente... ¡La mujer latina!
Gracias Thelma por tu amistad, por compartir tu sueños, por ser una verdadera amiga que mantiene mente optimista, como dice de ti la ex diputada, Luz del Carmen, es Thelma un ejemplo de una dama de bien ¡pero de lucha! Y vaya tu ejemplo para saludar y enviar felicitaciones a Angélica, Victoria, Carmen, María Elena ¡y tantas valiosas mujeres de Las Vegas!
¡Ánimo! Xavier@rivas.com
