Para muchos es Las Vegas la ciudad del juego y del pecado, como en la mayoría esto es parte de una metrópoli, cierto, pero Las Vegas no deja de sorprender por su calidad de vida, en lo general.
Es automático, la percepción que se tiene de nuestra ciudad, el juego, la apuesta, la desvelada, los show entre otros atractivos dignos de llamarse ciudad del pecado.
Pero, Las Vegas, que es Clark County, con 2 millones de habitantes, es también una ciudad segura, con buena urbanización, red de carreteras eficientes, un aeropuerto internacional, diversidad cultural, se hablan hasta 63 idiomas distintos, ofrece distintas religiones, la Fe como que se tiene más en cuenta, es una ciudad con esa armonía social digna de mantenernos en un estado de ánimo positivo y de progreso.
Seguido viajo a otras naciones, como en todo, las personas tienen la idea de que vivimos del juego, de la apuesta, que tomamos licor y basamos nuestras vidas familiares en los casinos.
Si bien es cierto que la economía de Las Vegas es en mucho resultado de la actividad de los grandes casinos, esta ciudad también es complementada por actividades como la energía alterna, sobre todo la solar, manufactura, tecnología, comercio, entre otras.
Los gobernantes han sabido diversificar su economía y han logrado tejer una comunidad eficiente en sus servicios públicos, en sus infraestructura educativa, recreación, parques y seguridad, es una hermosa ciudad para radicar.
Los medios de comunicación, este semanario, El Mundo, mantienen informado sobre las gestiones del gobierno y señalan problemas así como dan crédito a los logros, todo marcha como una máquina de reloj o casi...
Usted estimado lector, al final del día es parte de esta maquinaria y debemos por ello sentir el orgullo de ser y respetar a esta hermosa ciudad, una flor en el desierto, independiente de donde nacimos, somos de aquí, ¡Viva Las Vegas! Es nuestra Ciudad.
¡Momentum!
