La seguridad en LV con la llegada del 2016
El miedo es una respuesta natural del cuerpo ante el peligro, ciertamente es una sensación desagradable y puede presentarse debido a un suceso pasado o futuro, es difícil de controlar y provoca todo tipo de reacciones. El terror es el sentimiento de miedo en su escala máxima.
Los recientes acontecimientos relacionados con el atropellamiento de 36 turistas en el Strip, han puesto a prueba la capacidad de reacción de las autoridades encargadas de brindar protección y seguridad a la gente en esta ciudad. Las entidades que respondieron a la emergencia, lo hicieron de manera pronta y eficaz.
Sin embargo, el saldo de una persona muerta, los heridos y lesionados pone de manifiesto que es muy difícil evitar situaciones como la del pasado domingo 20, es casi imposible adivinar lo que pasa por la cabeza de quien perpetra este tipo de reprobables actos.
Vivimos las consecuencias de conductas anómalas, padecemos por la desintegración familiar, el bajo mundo de las adicciones, la conductora del automóvil que arrolló a decenas de inocentes no lo hizo bajo el influjo del alcohol, pero sí de alguna sustancia estimulante, dejó claro el Alguacil.
Expertos han manifestado que el devastador evento, la horrible tragedia que afectará a todas las familias de las víctimas para siempre, no tendrá repercusiones de largo plazo en el turismo que viene a esta ciudad, pero coinciden en que es una alerta para redoblar esfuerzos en la implementación de medidas de seguridad para la gente.
Ofrezca amor a manos llenas
Con un año a cuestas y otro al doblar la esquina, es el momento idóneo para reflexionar, sacar cuentas y volver a andar. Hace exactamente unos 12 meses llovieron los propósitos, algunos hechos realidad, otros quedaron el camino, mientras un número considerable duerme el sueño eterno.
Si no sacó tiempo para platicar con hijos y nietos, con los sobrinos, enseñarles que el amor y el respeto deben ir de la mano, que no deben desmayar en el intento de proseguir los estudios, ser amables, tolerantes, solidarios, entonces un consejo: aproveche los 365 días del 2016.
Reitérele a sus hijos que maestro no es el que más sabe si no el que mejor enseña. Que cada minuto cuenta. Lo que haga cada día por la educación de sus pequeños es un regalo. Es el momento de proponérselo y de llevarlo a feliz término.
Si con sus padres, sus hermanos, un amigo, un vecino, un compañero de trabajo tiene alguna diferencia, un mal entendido, estos son días de limar asperezas, de ofrecer disculpas y un abrazo. No lo deje para después, puede ser demasiado tarde.
Deséele lo mejor a toda persona que se encuentre, sonríale a la vida para que ésta le sonría a usted y a los suyos. Amar es tan natural como vivir y respirar.
Una cuenta sencilla, si le resulta difícil dejar el cigarro, o más aun bajar de peso, insista, no se rinda. Recuerde, por encima de todo, que para amar a Dios y al prójimo es requisito indispensable saber amarse plenamente a uno mismo y eso alcanza a la familia. No escatime. De amor a manos llenas.
