La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, calificó de “peligrosa” la retórica de los republicanos contra el trabajo del FBI en el registro a la mansión de Donald Trump, quien está siendo investigado por sustraer documentos clasificados de la Casa Blanca.
“Es irresponsable y peligroso que un líder sostenga una retórica que expone a las fuerzas del orden”, dijo la vicepresidenta a la prensa en Oakland (California).
Un hombre fue abatido al intentar entrar armado en la sede local del FBI en la ciudad de Cincinnati (Ohio), un incidente que los demócratas han vinculado a las críticas vertidas por los republicanos en contra de la actuación policial en casa de Trump.
Harris reivindicó que los agentes del FBI hacen “un trabajo muy importante” para garantizar la seguridad de la ciudadanía y condenó que se intente dañar a la institución por “motivos políticos”.
Asimismo, la vicepresidenta, quien fue fiscal general de California, dijo que tiene “plena confianza” en que el Departamento de Justicia está cumpliendo la ley.
El FBI registró el pasado lunes la mansión de Mar-a-Lago que tiene el expresidente en Florida en búsqueda de documentos clasificados que Trump se habría llevado ilegalmente al dejar el cargo.
El Gobierno de Joe Biden se ha desmarcado de la investigación, que lleva a cabo de forma independiente el fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, mientras que los republicanos y el propio Trump han denunciado una persecución política.
Ante estas criticas, la Justicia publicó el viernes la orden judicial que permitió el registro en Mar-a-Lago así como el inventario de bienes incautados por el FBI, entre los que hay una veintena de cajas, documentos etiquetados como “alto secreto” y un documento titulado “presidente de Francia”.
En la orden se indica que a Trump se le investiga por la posible comisión de tres crímenes: violación de la Ley de Espionaje, obstrucción de la Justicia y destrucción de documentos, que, en caso de condena, podrían conllevar desde multas hasta penas de prisión e inhabilitarle para ocupar cargos políticos. Washington (EFE)