La canciller federal de Alemania, Angela Merkel, declaró que la crisis de los refugiados tuvo el efecto de dividir y polarizar a la sociedad alemana, a pesar de que la economía del país está mejor que nunca.
"El tono del debate en Alemania se ha vuelto áspero", dijo Merkel en una combativa declaración del gobierno ante el pleno del Bundestag.
Esta declaración fue la primera de Merkel después de haber sido electa de nuevo como canciller federal para un cuarto mandato consecutivo, en un contexto en el que había mucha expectación porque la relación de fuerzas en el parlamento cambió.
Los partidos en el gobierno se debilitaron, mientras que la oposición de izquierda y derecha se fortaleció, en especial con el vigoroso surgimiento de un partido de ultraderecha populista: Alternativa para Alemania (AfD).
Merkel tampoco había recibido tantos ataques frontales procedentes de la oposición, cuando a sus líderes les tocó este miércoles su turno en el podio en el parlamento para contestar a la declaración de la jefa de gobierno.
La AfD, los Verdes, el Partido Liberal (FDP) y el Partido La Izquierda, criticaron a la gobernante con fuerza.
"A pesar de que el desempleo está bajando en forma sostenible, la recaudación fiscal en los estados y municipios aumenta, a pesar de que la inversión pública se incrementó, de que no concertamos nueva deuda en los últimos años, de que se canaliza más dinero a la educación y la investigación, a pesar de todo eso muchos ciudadanos manifiestan preocupación por el futuro“, declaró Merkel.
"El tono del debate público se ha vuelto áspero", enfatizó la canciller federal, tras agregar que "el respeto por opiniones contrarias ha retrocedido, el miedo a causa de las noticias falsas ha crecido, las preocupaciones por la cohesión de la sociedad han aumentado“.
"La cohesión social entre jovenes y personas de mayor edad ha disminuido, así como entre el este y el oeste del país, entre la gente en las ciudades y en el campo, entre quienes viven aquí desde hace generaciones y quienes llegan al país como migrantes o refugiados", señaló.
Merkel consideró que todo ello ha generado preocupación en los alemanes por el estado de derecho en en el país, e inseguridad por la eficacia de la economía social de mercado con vista al futuro.
Las consecuencias las resintieron los partidos del gobierno en las elecciones del 24 de septiembre de 2017, expresó.
Los tres partidos del gobierno son la Unión Demócrata Cristiana (CDU), la Unión Social Cristiana (CSU) y el Partido Socialdemócrata (SPD).
"Es indiscutible que entre la diversidad de desafíos de los años anteriores como los problemas de la Eurozona, la lucha contra el terrorismo internacional y los refugiados, han tensado la situación en forma sin precedentes“, apuntó.
Sobre la forma en que esos problemas, en especial el de los refugiados, deben ser resueltos, se han dividido y polarizado al país, "de tal manera que incluso una frase banal como 'lo vamos a lograr' que pronuncié en agosto de 2015 después de haberla dicho en muchas otras ocasiones en el pasado, polarizó al país".
Esa frase se convirtió en el punto de cristalización de esa discusión, dijo Merkel.
Agregó que la sociedad internacional ignoró y dejó de lado practicamente la migración masiva a causa de los conflictos armados en Siria e Irak, y por el desmoronamiento del Estado libio, "pero nosotros les abrimos las puertas a esos seres humanos que estaban en gran necesidad".
Esa declaración de la canciller federal alemana produjo una ovación, que probablemente provino de los partidos del gobierno.
Merkel recordó que Alemania recibió en 2014 a 200 mil refugiados, pero en 2015 fueron 890 mil.
La gobernante abordó todos los temas que conciernen hoy a Alemania, desde condenar el ataque de Turquía contra la ciudad siria de Afrin, donde combate a los kurdos y en el que han muerto innumerables civiles, hasta la Unión Europea.
"El futuro reside en la cohesión de Europa y se requiere una verdadera unificación económica. Eso es más que un mero mercado común", indicó.
Sobre el Islam dijo que Alemania es, en materia de religión, cristiano-judía, "pero también es cierto que en este país viven 4.5 millones de musulmanes, que entre tanto se han convertido en una parte de Alemania".
Sobre la situación económica del país dijo que es necesario que la gran prosperidad y el positivo desarrollo económico en Alemania lleguen a todos sus habitantes, y que el aligeramiento de las cargas económicas de las familias y el fortalecimiento de ésta constituyen una de las prioridades del gobierno alemán. Berlín (NOTIMEX)
