El miedo es una respuesta natural del cuerpo ante el peligro, ciertamente es una sensación desagradable y puede presentarse debido a un suceso pasado o futuro, es difícil de controlar y provoca todo tipo de reacciones.
El terror es el sentimiento de miedo en su escala máxima.
Los recientes acontecimientos relacionados con la masacre perpetrada contra gente que atendía un concierto en el Strip, pusieron a prueba la capacidad de reacción de las autoridades encargadas de brindar protección y seguridad a la gente en esta ciudad. Las entidades que respondieron a la emergencia, lo hicieron de manera pronta y eficaz.
Sin embargo, 58 personas muertas, los más de 500 heridos puso de manifiesto que es muy difícil evitar situaciones como la del pasado viernes 24 de noviembre en Egipto, donde cientos murieron mientras rezaban en una mezquita. Es casi imposible adivinar lo que pasa por la cabeza de quienes llevan a cabo este tipo de reprobables actos.
Estamos viviendo las consecuencias de conductas anómalas, padecemos las secuelas de la desintegración familiar, el bajo mundo de las adicciones, el sujeto que disparó a decenas de inocentes no lo hizo bajo el influjo del alcohol, lo planeó de manera sistemática.
Expertos han manifestado que el devastador evento, la horrible tragedia que afectará a todas las familias de las víctimas para siempre, no tendrá repercusiones de largo plazo en el turismo que viene a esta ciudad, pero coinciden en que fue un llamado de alerta para redoblar esfuerzos en la implementación de medidas de seguridad para la gente.
De hecho, las autoridades de transporte empezaron a construir barreras a lo largo de las aceras de segmentos en el Strip.
Luego del feriado de Acción de Gracias, el jueves 23 de noviembre, la gente se envolvió en la bulliciosa tarea de aprovechar las grandes ofertas que los almacenes pusieron a disposición del público el Viernes Negro; la fiebre siguió su curso y, el Lunes Cibernético, se registró un récord ventas online, quizá no las que esperaban las grandes empresas, pero entendiendo que ellos nunca se dan por satisfechos, fue un buen indicativo de la solidez de la economía norteamericana.
En esta ciudad, aunque muchas personas muestran cuadros depresivos, la reunión familiar, la comida y el ambiente festivo, hace que se sienta un ambiente cordial en camino de la temporada navideña.
La semana pasada las autoridades de las distintas corporaciones: Henderson Police Department, North Las Vegas Police Department y Las Vegas Metropolitan Police Department, dieron a conocer medidas de precaución que la gente puede tomar para resguardarse y evitar ser víctima de los amantes de lo ajeno.
Si ve algo sospechoso, repórtelo a las autoridades, si sabe de algo o de alguien que represente un peligro para la ciudadanía, repórtelo, esa es una manera efectiva de colaborar con nuestra propia seguridad.
Esta es una etapa de reflexión, de alegría, propicia para compartir con nuestros seres queridos. Hacerlo de manera cordial y, en familia, nos proporcionará, sin dudas, la tranquilidad que nuestro espíritu demanda.