Para el hombre que tiene una buena madre son sagradas todas las mujeres
Una vez más llega la fecha del agradable ‘dolor de cabeza’, el momento de escoger los regalos y felicitar a mamá. Los mexicanos (as) celebraron una jornada tan importante el pasado miércoles 10. Este domingo 14 es el gran día para personas de diferentes nacionalidades.
Sin dudas cada persona, sin importar la edad, el sexo, sus creencias, su país de origen, expresa el amor a su madre de diferente manera, el denominador común son las palabras cariñosas; algunos recuerdan anécdotas, situaciones difíciles en que ha salido a relucir el amor, el infinito cariño, el sacrificio inmenso de las madres.
Cuánta razón le asiste a quienes esgrimen que “tener a la madre es como tener siempre la manta contra el freio, el paraguas contra la lluvia, el pan para el hambre y la cura para la herida”.
Es un día precioso este dedicado a las madres, a las del amor eterno, sea 10 de mayo o el segundo domingo del mes, bien lo dijo José Martí “toda madre debía llamarse maravilla”.
Resulta difícil ser original cuando se escribe sobre las madres, se ha escrito y platicado mucho acerca ellas, de su amor sin límites -y nunca será bastante-, por su entrega incondicional, su capacidad de sacrificio.
De los regalos que la vida tiene que dar, una buena madre es el más grande.
Muchas personalidades han hecho, en determinado momento, un alto en sus múltiples ocupaciones para dedicar frases de amor a quien las trajo al mundo. Abraham Lincoln, figura imprescindible en la historia de los Estados Unidos, del que fue presidente, escribió: “Todo lo que soy o espero ser se lo debo a la angelical solicitud de mi madre”.
Le asiste mucha razón a quien apuntó: “el mundo te ve como una madre, para nosotros eres el mundo”. O esta otra hermosa frase: “podría decírtelo con una rima, o mejor aún con una flor, pero te lo diré de palabra... mamá, eres la mejor”.
Relevante la actividad del lunes 8 a cargo de Padres en Liderazgo que acogió Family Engagement Department del Distrito Escolar del Condado Clark. Excelente que se reunieran tantas madres, se sintieran reconocidas y regocijadas.¡Qué bonito gesto! La presencia en calidad de invitados del superintendente Jesús Jara, de Astrid Silva (anfitriona), entre otros, dio un toque de distinción al evento. Felicitaciones.
Los regalos, las flores, las tarjetas, las salidas a comer, concederán a este domingo 14 una nota diferente, claro que las madres merecen todos los días del año, y nada como el abrazo del hijo (a) querido, de esa personita que vio crecer dentro de sí y que hoy se empina, hijo amantísimo. Qué hermoso presente el estar ahí para mamá.
Alguien dijo: “Sabes que eres una madre cuando vas a una tienda a comprarte algo y sales con bolsas llenas de cosas para tus hijos”.
Los dueños de este semanario, el equipo de trabajo que se esmera en destacar el quehacer comunitario, les desea a las madres MUCHAS FELICIDADES.
