La polarización de las elecciones presidenciales en Brasil, donde un representante de la extrema izquierda y otro de la extrema derecha podrían disputar la segunda vuelta, y la baja actividad económica llevarán al Producto Interno Bruto (PIB) del país a crecer apenas 1.35 por ciento este año, pronosticaron expertos.
La revista Focus, publicación semanal del Banco Central del país que aúna las principales opiniones del sector financiero y económico, rebajó por quinta semana consecutiva las previsiones del PIB de Brasil, aunque la mantuvo en 2.5 por ciento para el año próximo.
La semana pasada el gobierno del presidente Michel Temer, que había anunciado inicialmente un vigoroso crecimiento del 3.5 por ciento, rebajó hasta el 1.6 por ciento esta previsión, ante la caída de algunos sectores como el consumo doméstico y las dificultades de la industria.
Con todo, es la preocupación de un aumento súbito de la inflación –controlada hasta ahora por debajo del 4.5 por ciento de objetivo oficial- lo que comienza a preocupar, como consecuencia de la rápida desvalorización de la moneda brasileña, el real, que cruzó la barrera “psicológica” de las cuatro unidades por dólar y no retrocedió desde hace semanas.
Los resultados de las encuestas electorales publicadas la semana pasada apuntan a un escenario de gran polarización, con el exmilitar de ultraderecha Jair Bolsonaro como favorito con el 28 por ciento del apoyo, y en segundo lugar Fernando Haddad, del Partido de los Trabajadores (PT), con erl 18 por ciento de respaldo.
A este cuadro de polarización se suma la incertidumbre y los efectos de la crisis de Argentina, uno de los mayores compradores de Brasil. Río de Janeiro (NOTIMEX)
