Receptores de visas humanitarias ocupan puestos vacantes

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Representantes de organizaciones proinmigrantes rechazaron que el programa que concede visados humanitarios a cubanos, venezolanos, haitianos y nicaragüenses suponga una carga económica para los estados receptores y argumentaron que es al contrario, porque será una contribución para las arcas públicas.

El director en Florida de la organización American Business Immigration Coalition, el venezolano Samuel Vilchez Santiago, calificó de “solución de sentido común” el “parole” humanitario en favor de los nacionales de esas cuatro naciones que el presidente Joe Biden puso en marcha en enero.

“El programa ofrece un camino para que los inmigrantes ingresen a la fuerza laboral”, algo importante en medio de un contexto económico como el actual y en momentos en que en EE.UU. “escasea mano de obra en varios sectores”, agregó.

La directora ejecutiva de esta organización, Adelys Ferro, aludió a estudios que reflejan que “una gran cantidad de estos inmigrantes que logran estatus legal ocupan puestos de trabajo vacantes.

“Para los estados receptores, la ayuda desde el punto de vista económico va mucho más allá de pagar impuestos”, añadió.

“Nuestra empresas necesitan estos nuevos trabajadores, es lo más sensato que se puede hacer”, sostuvo Vilchez.

EEUU anunció que aceptará a más de 30 mil migrantes al mes de Venezuela, Cuba, Nicaragua y Haití, expande un programa por el que desde octubre concede permisos humanitarios a venezolanos.

“Es doloroso que el programa se use como arma política por republicanos”, se lamentó María A. Díaz, presidenta de la Venezuelan American Alliance y patrocinadora junto con su esposo de unas 20 personas.

Señaló que ha podido comprobar cómo “dar una oportunidad a una persona tiene una repercusión positiva en familiares que se quedan en Venezuela”.

Vilchez y Maureen Porras, concejal de la ciudad de Doral, que acoge una de las más grandes diásporas de venezolanos en EE.UU., aludieron a la reducción del número de inmigrantes irregulares que llegan de esos cuatro países. Miami (EFE)

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