Por Christopher S. RUGABER
La producción industrial de Estados Unidos creció en agosto al ritmo más fuerte en más de tres años, gracias a que las fábricas produjeron más bienes y al aumento de pedidos nuevos.
El Institute for Supply Management (Instituto de Gerencia de Suministros), que agrupa a los gerentes de compras de Estados Unidos, informó que su índice manufacturero subió a 59 desde 57,1 en julio. Cualquier registro por encima de 50 indica que el sector manufacturero está creciendo.
A su vez, un indicador de la producción se elevó al máximo nivel en cuatro años y un barómetro de los pedidos nuevos subió a su nivel más alto en 10 años. Eso indica que el sector debería seguir creciendo en los próximos meses.
El informe del martes 2 coincide con otras señales de que la manufactura está impulsando la mejora de la economía. Las fábricas se benefician con la fuerte demanda de aviones, muebles y acero y otros metales. El impulso de la manufactura ha permitido compensar el lento crecimiento de la construcción de viviendas, la desaceleración de las compras de consumo y la baja del gasto en servicios públicos.
“La economía estadounidense ha tomado el camino del crecimiento con mayor firmeza este verano (boreal), aunque los consumidores viajan en el último vagón”, escribió Sal Guatieri, economista de BMO Capital Markets, en un trabajo de investigación.
El índice de producción del ISM alcanzó su nivel más alto en cuatro años, y el de pedidos su nivel más alto en 10 años. Esto indica que el sector seguirá creciendo en los próximos meses. Las fábricas crearon nuevos empleos en agosto, aunque a una tasa levemente menor que en julio.
Los fabricantes estadounidenses enfrentan algunas dificultades en el exterior. Una medida de pedidos de exportaciones aumentó, pero varios de los encuestados por el ISM dijeron que la guerra en Ucrania y la desaceleración del crecimiento en China afectaban los negocios. WASHINGTON (AP)