El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, calificó de “majadera” la consulta iniciada por Estados Unidos sobre la política energética mexicana y criticó a la representante comercial de EE.UU., Katherine Tai, por hablar del tema.
"Viene la consulta y totalmente majadera, en un tono soberbio de prepotencia haciendo referencia de que la reforma energética que se había llevado a cabo en el país (en 2013) era la panacea cuando nosotros sostenemos lo opuesto”, declaró en su rueda de prensa matutina.
López Obrador afirmó que 15 días antes de que se emitiera su iniciativa de reforma eléctrica en México, que busca privilegiar a las empresas del Estado sobre las extranjeras, tuvo una reunión con empresarios estadounidenses en donde atendió “caso por caso” las controversias de su iniciativa.
“No se debió solicitar la consulta, no había motivo, no sé informó bien al Gobierno de Estados Unidos”, dijo.
López Obrador criticó además a Tai por considerar que hubo un intervencionismo con la intención de obligar a México a modificar sus propias leyes y defender la reforma energética del expresidente Enrique Peña Nieto (2012-2018) que abrió el sector a la inversión privada.
“Entonces ahí, la señora encargada del comercio en Estados Unidos (estuvo) diciendo que era muy buena la reforma (de 2013) y que además lo que nosotros estábamos haciendo estaba mal al reformar la ley eléctrica”, señaló.
Asimismo, afirmó que está dispuesto a recibir al secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, quien visitará el país en septiembre, para hablar sobre las diferencias en materia energética en el marco del Tratado entre Estados Unidos, México y Canadá (T-MEC).
Pero aclaró que no está contemplada una reunión porque Blinken viaja a continuar el Diálogo Económico de Alto Nivel (DEAN), en el que no participa el presidente.
“En caso de que se diese la reunión aprovecharía para decirle, comunicarle, lo que nosotros sostenemos y vamos a seguir sosteniendo pero esto no es ruptura, es argumentar y defender a México”, dijo.
López Obrador insistió en que las relaciones con Estados Unidos son buenas.
“Nos necesitamos mutuamente, sería muy difícil que funcionara la economía estadounidense sin la participación de México, así como nos importa mucho la relación con Estados Unidos, a ellos también”, zanjó.
Y expresó su esperanza de que el Gobierno estadounidense cambie de parecer “porque aunque se vaya un panel (de controversia) donde sea, pues no hay razón”.
Finalmente, manifestó su confianza de que la inversión extranjera seguirá llegando a México pese a las declaraciones de la semana pasada del embajador estadounidense en su país, Ken Salazar, quien aseveró que por situaciones como la violencia la inversión “se enfría”.
“Eso solo que haya una decisión política de la Casa Blanca así, una ruptura, y aún así les aseguro que seguiría llegando inversión a México", aseveró.
Las audiencias sobre la política energética mexicana entre los tres países tienen una duración de 75 días naturales, como están contempladas en el T-MEC. México (EFE)