Actores, guionistas, directores y autores exigieron la renuncia del ministro de Cultura de Buenos Aires, Darío Lopérfido, por haber puesto en duda el número de desaparecidos durante la dictadura militar de Argentina (1976-1983).
"En Argentina no hubo 30 mil desaparecidos, se arregló ese número en una mesa cerrada para conseguir subsidios", afirmó la semana pasada el funcionario durante un evento público al descalificar la lucha por los derechos humanos realizada durante décadas en este país y que ya logró la condena de 622 represores.
Lopérfido reabrió así un debate en el que recibió críticas de los organismos de derechos humanos, dirigentes políticos e intelectuales, pero a cambio fue respaldado por personajes que justifican los crímenes cometidos en una de las dictaduras más sangrientas de la historia de América Latina.
Parte de la comunidad artística se sumó al creciente debate al enviarle una carta al jefe de gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, en la que manifiestan su "consternación" por las declaraciones de un ministro de cultura.
"Las ofensivas declaraciones de Darío Lopérfido al cuestionar el número de desaparecidos banalizan una de las páginas más negras de la historia argentina e incurren en el arriba mencionado negacionismo, entendido como delito en países como Alemania, Francia, Austria, Israel y Polonia, entre muchos otros", señalaron.
Además, advirtieron que teniendo en cuenta que entre esos desaparecidos se encuentran muchos integrantes de la comunidad artística por cuyos intereses el ministro debería velar, "sus dichos resultan doblemente aberrantes".
Los artistas explicaron que "nos negamos a entrar en la discusión numérica que se pretende instalar, pero creemos que este tipo de declaraciones, entre otras que denotan una apabullante ignorancia de los datos más elementales de historia y geopolítica, son incompatibles con su responsabilidad institucional".
Declararon también que "ya llevamos demasiado tiempo soportando dentro de nuestra actividad a un funcionario que concentra el repudio de la gran parte de los trabajadores del quehacer teatral y cultural" que debería revisar públicamente su responsabilidad en hechos más recientes que la dictadura.
"Es por todos conocida su íntima participación en el gobierno que declaró un irresponsable Estado de Sitio en medio de una feroz crisis económica y que derivó en los sangrientos sucesos de 19 y 20 de diciembre de 2001 que terminaron con la vida de cuarenta conciudadanos", recordaron.
En respuesta al alud de críticas recibidas por diversos sectores, Lopérfido aseguró que fue atacado "por los comisarios políticos del kirchnerismo", es decir, de los pasados gobiernos que encabezaron Néstor Kirchner y Cristina Fernández.
"Nadie, excepto alguien con aviesa voluntad de dañar, puede dudar de mi profunda adhesión a favor de los derechos humanos y mi repudio más absoluto y contundente a la peor etapa de la historia argentina", afirmó.
El funcionario reconoció que la dictadura "ejecutó un plan sistemático de desaparición y muerte que merece mi juicio condenatorio" pero "entiendo que la historia de la violencia política en la Argentina merece una reflexión atenta y una memoria constante". Buenos Aires (NOTIMEX)