Dallas, 7 Abr (Notimex).- Nuevo México se convirtió hoy en la séptima entidad de Estados Unidos en promulgar una ley que prohíbe a los trabajadores de la salud el tratar de cambiar a través de terapias la orientación sexual o la identidad de género de los menores.
“He pasado mi carrera luchando por los niños, tanto como fiscal y como gobernadora. Es por esta razón es que hoy firmo la Ley Senatorial 121, que prohíbe ciertas prácticas que han demostrado causar daño a niños”, señaló la gobernadora en una declaración este viernes.
“No promulgo a la ligera la legislación”, aseguro al indicar que la Asociación Americana de Psicología ha repudiado la práctica de terapias para tratar de cambiar la orientación sexual de las personas, afirmando que puede conducir a depresión, ansiedad, mala autoestima, auto-odio, abuso de sustancias y suicidio.
El nuevo estatuto enmienda la Ley de Prácticas Desleales del Estado para prohibir a los profesionales de la salud cualquier tratamiento que busque cambiar la orientación sexual o identidad de género de una persona.
La nueva ley prohíbe cualquier esfuerzo para cambiar conductas o expresiones de género o eliminar o reducir atracciones sexuales, románticas o sentimientos hacia personas del mismo sexo.
La Academia Americana de Pediatría, la Asociación Americana de Psiquiatría, la Asociación Psiquiátrica Americana y la Asociación Americana de Psicología indicaron en un informe en 2008 que asumían la posición de que "la homosexualidad no es un trastorno mental y por lo tanto no es algo que necesite o pueda ser 'curado'”.
Nuevo México se suma así a los estados de Nueva Jersey, California, Oregon, Illinois, Nueva York y Vermont que han adoptado políticas similares.
