El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, afirmó que “no tiene información” sobre si Estados Unidos entregará a México a Osiel Cárdenas Guillén, exlíder del Cartel del Golfo y fundador de la banda del narcotráfico de Los Zetas, tras su excarcelación el pasado viernes 30 de agosto.
“Todavía no tenemos información, pero sí hay comunicación (con Estados Unidos)”, respondió el mandatario ante preguntas de la prensa.
Cárdenas Guillen, de 57 años y quien enfrenta varias acusaciones en México, pasó el viernes 30 de agosto de una cárcel en Indiana a estar bajo custodia del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés) de Estados Unidos tras cerca de 17 años detenido por narcotráfico.
El hombre fue uno de los capos más buscados en México y recibió en 2010 una condena a 25 años de cárcel en una corte de Texas, aunque solo cumplió el 75 % de su sentencia.
El líder criminal se declaró culpable de cinco cargos relacionados con narcotráfico mediante un acuerdo con la Fiscalía, que le retiró otros 12 cargos que le habrían implicado cadena perpetua.
El presidente dijo desconocer cuál sería el futuro del capo en México, donde operaba en el noreste del país, en la frontera con Texas. “La Fiscalía (General de la República) se los puede informar”, concluyó en sus breves comentarios.
Según la acusación del Departamento de Justicia de EEUU, en su momento de mayor apogeo la organización encabezada por Cárdenas Guillén realizaba actividades de narcotráfico en Houston, Chicago y Atlanta.
Conocido bajo el alias ‘el Ingeniero’, Cárdenas Guillén quedó detenido en México en 2003 y extraditado a EEUU en 2007 junto con otros tres narcotraficantes mexicanos.
Osiel Cárdenas Junior, quien es el hijo de Cárdenas Guillén, también recibió una condenado el año pasado, para pasar más de nueve años de cárcel por contrabando de armas a México. México (EFE)
