Las dos Coreas analizan la posible reubicación de los sistemas de artillería de largo alcance de Corea del Norte lejos de la tensa frontera entre ambas naciones, señaló el primer ministro surcoreano, Lee Nak-yon.
El régimen de Pyongyang ha desplegado aproximadamente mil piezas de artillería a lo largo de la frontera, lo que representa una amenaza significativa para Seúl y el área metropolitana, sin embargo, los dos países vecinos avanzan para reducir las tensiones.
En un discurso que marcó el 68 aniversario del estallido de la Guerra de Corea de 1950-53, Lee afirmó que "se está discutiendo la posibilidad de mover la artillería de largo alcance (de Corea del Norte), y explicó qué tipos de pasos de buena voluntad entre los lados se han tomado en los últimos meses.
Sus comentarios tuvieron lugar en medio de un deshielo aparente en las relaciones intercoreanas, tras las dos cumbres históricas mantenidas, el 27 de abril y 26 de mayo, entre el presidente surcoreano, Moon Jae-in, y el líder norcoreano Kim Jong-un.
Desde entonces se han celebrado una serie de reuniones intercoreanas a nivel de trabajo y se ha acordado realizar la primera reunión en casi tres años de las familias separadas por la guerra.
Por otra parte, el gobierno de Seúl ha anunciado el inicio esta semana de una serie de conversaciones sobre proyectos económicos bilaterales con Pyongyang derivadas de la pasada cumbre intercoreana
De acuerdo con el Ministerio de Unificación, las conversaciones se centrarán en la conexión y modernización de ferrocarriles transfronterizos, así como en cooperación en materia de carreteras y silvicultura.
Los comentarios de Lee parecen ser la primera confirmación oficial de Seúl sobre los informes de los medios de que Corea del Sur exigió al Norte la reubicación de sus piezas de artillería durante las conversaciones militares intercoreanas de este mes.
El Ministerio de Defensa de Seúl, que ha negado esos informes, dijo que no tenía comentarios inmediatos sobre el discurso de Lee.
El llamado "libro Blanco" de Defensa de Corea del Sur de 2016 describió la artillería de largo alcance del Norte como una de las mayores amenazas del país, junto con sus programas nucleares y de misiles.
Seúl, una ciudad capital con 10 millones de habitantes, se encuentra a unos 40-50 kilómetros de la frontera.
Los medios de comunicación surcoreanos especularon que durante las conversaciones militares del 14 de junio, el Norte probablemente exigió que Corea del Sur y Estados Unidos retiren sus propios sistemas de artillería de la frontera como una medida recíproca.
Cerca de 28 mil 500 soldados estadounidenses están desplegados en Corea del Sur.
También el lunes, oficiales militares de las dos Coreas se reunieron para discutir cómo restaurar completamente sus canales de comunicación de la línea militar, de acuerdo con el Ministerio de Defensa del Sur. Los resultados de las conversaciones se esperaban más tarde el lunes.
Las conversaciones se produjeron un día después de que Seúl dijo que "suspendería indefinidamente" dos simulacros militares anuales en pequeña escala con Estados Unidos.
Se suponía que los simulacros de infantes de marina de los aliados ocurrirían de julio a septiembre, según un comunicado del Ministerio de Defensa de Corea del Sur.
Corea del Sur está dispuesta a tomar medidas adicionales no especificadas si Corea del Norte participa continuamente en negociaciones "productivas".
La semana pasada, Corea del Sur y Estados Unidos anunciaron la suspensión de sus ejercicios militares anuales más grandes, llamados Ulchi Freedom Guardian, como parte de sus esfuerzos para aumentar las posibilidades de una diplomacia nuclear exitosa con el Norte.
Algunos expertos dicen que la suspensión de los ejercicios podría debilitar la postura de defensa combinada de los aliados contra Corea del Norte. Seúl (NOTIMEX)