La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) reclamó a la Justicia mexicana que siga investigando la desaparición hace 19 años del periodista Alfredo Jiménez Mota, identifique y castigue a los responsables.
La SIP, con sede en Miami (Florida), recordó las circunstancias de la desaparición de Jiménez hace 19 años y destacó “el valor de su valiente tarea”.
Jiménez Mota, cuyo paradero se desconoce desde el sábado 2 de abril de 2005, cuando tenía 25 años, dedicó su prometedora carrera profesional a investigar temas vinculados con el crimen organizado y la seguridad pública para el diario El Imparcial, en Hermosillo, Sonora, señaló SIP.
Según investigación de la SIP, encargada a la periodista María I. Gómez en 2009, las autoridades mexicanas reconocieron en su momento que la desaparición del periodista estuvo vinculada a sus reportajes sobre el narcotráfico.
Tras la desaparición de Jiménez Mota y las amenazas que recibieron otros colegas, El Imparcial decidió interrumpir las investigaciones sobe el narcotráfico.
En mayo de 2009 la SIP elevó la investigación periodística del caso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
El presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, Carlos Jornet, reiteró la exigencia de “seguir combatiendo la impunidad en los casos de asesinatos contra periodistas”.
Jornet exhortó a los candidatos a la Presidencia de México a subrayar en su agenda política “el rol esencial del periodismo en una democracia, a impulsar las acciones necesarias para frenar la violencia contra la prensa”.
En diciembre de 2021, ante la presencia de la familia de Jiménez Mota, el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas, ofreció disculpas porque el Estado “no pudo garantizar ni proteger la integridad” del periodista.
Si bien los familiares de Jiménez estimaron como positivo que el gobierno retomara la investigación por la desaparición de Alfredo, se mostraron escépticos de que se lograra un avance para conocer su paradero. Miami (EFE)