López Obrador ve coincidencias entre México y el nuevo gobierno de Brasil

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, expresó su alegría por la toma de posesión del presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, al destacar que entre ambos gobiernos existen “coincidencias”.

“Estamos muy contentos con la llegada del presidente Lula, fue un acontecimiento porque es el regreso de un proyecto popular no oligárquico”, expresó el mandatario.

López Obrador, quien no asistió a la ceremonia de investidura del mandatario brasileño pero fue representado por su esposa Beatriz Gutiérrez Müller, reveló que fue ella quien le dijo sobre la intención de Lula de visitar México.

“Ella le transmitió que siempre va a ser bienvenido a nuestro país, que el pueblo de México y Brasil son hermanos, somos hermanos y ahora con muchas coincidencias del gobierno de Brasil porque ese gobierno va a luchar por la igualdad, la justicia, también en situaciones complejas”, afirmó.

Sin embargo, dijo que Lula tiene “mucho oficio político” que le ayudará a enfrentar estas situaciones.

“Es un hombre muy experimentado, va a tener una oposición beligerante ya desde que representantes del pueblo de Brasil le pusieron la banda yo creo que es más simbólico, mucho más representativo porque el señor Bolsonaro decidió viajar a Estados Unidos”, criticó.

Recordó que el ahora presidente brasileño enfrentó “una embestida muy fuerte” que lo llevó “injustamente” a la cárcel pero resistió y salió de prisión para volver a gobernar Brasil.

“Lo logró a pesar de que utilizaron muchísimo dinero para evitar que triunfara y lo logró con el apoyo del pueblo de Brasil”, reconoció.

El líder progresista, de 77 años, que ya gobernó entre 2003 y 2010, regresó a la presidencia tras derrotar en unas ajustadísimas elecciones al ultraderechista Jair Bolsonaro, quien no ha reconocido su derrota y abandonó Brasil hace dos días, rumbo a EEUU, para evitar tener que entregar a Lula la banda presidencial.

La toma de posesión contó con un fuerte respaldo internacional, con delegaciones llegadas de 68 países, incluyendo 20 jefes de Estado o de gobierno, un significativo apoyo popular, con cerca de 300 mil personas que abarrotaron el centro de Brasilia. México (EFE)

Top