El presidente iraní, Hasán Rohaní, anunció que su país activará próximamente las modernas centrifugadoras IR9 de nueva generación para aumentar sus reservas de uranio enriquecido.
El anuncio se da como parte de los pasos a seguir por la República Islámica para reducir sus obligaciones estipuladas en el Plan Integral de Acción Conjunta (PAIC) firmado en 2015, luego de que el año pasado Estados Unidos lo abandonó y reactivo una serie de sanciones en su contra.
La implementación de centrifugadoras más avanzadas y rápidas se da como parte de sus nuevos pasos nucleares para enriquecer uranio más allá del límite del 20 por ciento, y se suma a 20 centrifugadoras IR-4 y 20 IR-6 que puso en operación en septiembre.
De ser operadas con éxito, pueden permitir a Irán acelerar significativamente su acumulación de uranio enriquecido, material que Occidente teme que pueda ser usado en la fabricación de un arma nuclear.
La república islámica dice que refina uranio sólo para fines civiles, no militares.
Hasta la fecha Teherán a señalado que volverá a cumplir con sus compromisos del PAIC sobre el programa nuclear iraní, en cuanto lo hagan los otros países firmantes.
En julio de 2015, Irán y seis mediadores internacionales -Rusia, Estados Unidos, el Reino Unido, China, Francia y Alemania- firmaron el PAIC que estableció una serie de limitaciones al programa nuclear iraní para excluir su posible dimensión militar, a cambio del levantamiento de sanciones internacionales.
Bajo un acuerdo nuclear internacional firmado en 2015, Irán acordó reducir la pureza de su uranio enriquecido al 3 por ciento.
Las centrífugas giran a velocidad supersónica para incrementar el contenido porcentual del isótopo fisionable del mineral.
El uranio refinado puede alimentar plantas de energía nuclear, lo cual constituye el objetivo principal de Irán, o brindar el núcleo de una bomba atómica, que según Estados Unidos e Israel podría ser la meta final. Teherán (NOTIMEX)