El presidente electo Donald Trump completó su gabinete sin incluir a ningún latino o latina en ninguna de las mayores carteras del gobierno federal, por primera vez desde la presidencia de Ronald Reagan.
Trump anunció la designación del ex gobernador Sonny Perdue como secretario de Agricultura, la última de las vacantes pendientes antes de completar la lista final de nominados para su gobierno, que inicia al mediodía del 20 de enero.
"Donald Trump empezó su campaña presidencial atacando a la comunidad latina, así que esto sólo es la culminación de la hostilidad que nos ha mostrado desde el primer día", lamentó el presidente del Latino Victory Fund, Cristóbal Alex.
Las organizaciones latinas seguirán luchando para asegurar que los hipanos estén representados en todos los niveles del gobierno, añadió.
"Estoy muy decepcionado y es alarmante que (...) no se ha nombrado a ningún latino al gabinete del presidente electo Trump", señaló el director ejecutivo de la Asociación Nacional de Funcionarios Latinos Electos (NALEO), Arturo Vargas.
"Hemos tenido latinos a ese nivel de gobierno desde 1988 cuando el republicano Ronald Reagan nombró a Lauro Cavazos como secretario de Educación", añadió.
La designación de Cavazos, de origen mexicano y de filiación política demócrata, puso en marcha una tradición de los últimos cinco presidentes estadunidenses de incluir al menos a un hispano en una posición de alto nivel del gobierno federal, en una Secretaría de Estado o embajada.
George H. W. Bush designó a Manuel Luján como secretario del Interior: Bill Clinton colocó a Federico Peña como secretario de Energía, donde fue sucedido por el mexicano-estadunidense Bill Richardson, así como a otro latino de origen mexicano, Henry Cisneros, como secretario de Vivienda.
Durante su gobierno, George W. Bush designó a otro mexicano-estadunidense, Alberto González, como procurador de Justicia; así como a dos cubano-estadunidenses, Carlos Gutiérrez como secretario de Comercio y Mel Martínez en Vivienda.
Por su parte, el presidente Barack Obama nombró a dos mexicano-estadunidenses (a Ken Salazar como secretario del Interior y a Julián Castro en Vivienda, a la nicaragüense-estadunidense Hilda Solís como secretaria del Trabajo, quien fue sucedida por el dominicano-estadunidense Tom Pérez y al puertorriqueño John King en Educación.
Sean Spicer, el próximo secretario de prensa de Donald Trump, defendió la "diversidad" del gabinete de Trump y sugirió que los latinos estarán representados en alguno de los más de cinco mil puestos, de menor nivel, aún pendientes.
"(Donald Trump) continua forjando un gabinete sorprendentemente diverso. Si estas buscando a hispanos, conforme continuamos, tenemos cinco mil cargos que llenar. Va a haber un tremendo número de hispanos que llenen esos puestos", indicó.
En términos de minorías, el gabinete de Trump incluye a un afro-estadunidense Ben Carson, como secretario de Vivienda y a la taiwanesa Elaine Chao, esposa del líder republicano del Senado, Mitch McConnell, como secretaria del Transporte.
El liderazgo demócrata del Senado se ha quejado del hecho de que el gabinete de Trump asemeja a un club de millonarios y billonarios que han gastado millones de dólares en cabildear al gobierno federal para beneficio de sus empresas o intereses comerciales.
"Este es el gabinete del pantano, lleno de banqueros y billonarios", deploró el líder de los demócratas en la cámara alta, Charles Schumer, ironizando sobre promesa de campaña de Trump de "secar el pantano" de los intereses creados en Washington.
Los demócratas cuestionaron asimismo al liderazgo republicano del Senado por apresurar las audiencias de confirmación del gabinete de Trump sin completar el trámite legislativo que los obliga a entregar documentos sobre su patrimonio a la Oficina de Ética del gobierno. Washington (NOTIMEX)