Por Ken DILANIAN
Rusia fue responsable de “crear las condiciones” que resultaron en el derribo del vuelo 17 de Malaysia Airlines, dijeron el martes 22 altos funcionarios estadounidenses de inteligencia, sin que ofrecieran pruebas de una participación directa del gobierno ruso en el incidente.
Los funcionarios fueron cautelosos en su evaluación al destacar que, aunque los rusos mantienen el suministro de armas a los separatistas en el este de Ucrania, Estados Unidos carece de pruebas directas para afirmar que el misil que tumbó el avión de pasajeros hubiera provenido de Rusia.
Los funcionarios hablaron con la prensa bajo normas de que sus nombres no sean utilizados al declarar sobre asuntos de inteligencia relacionados con el desastre aéreo de la semana pasada, en el cual murieron 298 personas.
El avión posiblemente fue derribado por un misil tierra-aire SA-11 disparado por los separatistas, apoyados por Rusia, en el este de Ucrania, dijeron los funcionarios, que mencionaron llamadas interceptadas, fotografías de satélite y contenidos difundidos por los insurgentes en las redes sociales. La autenticidad de algunos de éstos ya ha sido verificada por expertos de Estados Unidos.
Sin embargo, los funcionarios dijeron desconocer quién disparó el misil o si había agentes rusos en el lugar donde se efectuó el lanzamiento. Tampoco pudieron afirmar con certeza que el grupo para el lanzamiento de misiles haya sido adiestrado en Rusia, aunque señalaron que Moscú intensificó en las últimas semanas su campaña para armar y entrenar a los rebeldes, situación que ha continuado incluso después del derribo del avión de pasajeros.
En cuanto a quién disparo el cohete, “no tenemos un nombre, no tenemos su rango y ni siquiera estamos seguros 100% de su nacionalidad”, dijo uno de los funcionarios, quien también declaró que “no habrá aquí una solución tipo Perry Mason”.
Ben Rhodes, asesor adjunto de seguridad nacional de la Casa Blanca, dijo que Estados Unidos continúa trabajando para determinar si el disparo del misil tenía una “vinculación directa” con Rusia, incluido si había rusos en el lugar durante el ataque y el grado de adiestramiento de los rusos a los separatistas para lanzar un ataque de este tipo.
“Creemos que el presidente (Vladimir) Putin y el gobierno ruso tienen responsabilidad por el apoyo que han dado a los separatistas, las armas que les han suministrado, el adiestramiento que proporcionaron y por el ambiente de inestabilidad en general en el este de Ucrania”, declaró Rhodes en entrevista con la cadena CNN.
Agregó que continúa el tránsito de armamento pesado de Rusia a Ucrania después del derribo del avión.
Los funcionarios dijeron que la explicación más probable sobre el derribo de la aeronave es que los rebeldes cometieron un error. Los separatistas habían derribado antes 12 aviones militares ucranianos, según los funcionarios.
Dijeron que basaban en parte sus afirmaciones en los mensajes en redes sociales y los videos que difundió en los últimos días el gobierno ucraniano, aunque no han logrado verificar la autenticidad de los contenidos.
Por ejemplo, citaron el video de un vehículo lanzador de misiles del que se dice que cruzaba la frontera rusa después del lanzamiento y al que se ve que le falta uno de los cohetes.
Sin embargo, más tarde, ante las insistentes preguntas, los funcionarios reconocieron que no habían verificado que el video fuera exactamente lo que parecía ser.
A pesar de la nebulosidad de algunos detalles, sin embargo, los funcionarios de inteligencia dijeron que los argumentos de que los separatistas fueron responsables del derribo de la aeronave tienen solidez.
Otros escenarios, como el que las fuerzas militares ucranianas hayan derribado el avión, no son plausibles, dijeron. Ucrania no tenía ningún sistema de misiles tierra-aire dentro del rango de tiro. (AP)