Por Josh LEDERMAN
Estados Unidos calificó el lunes 2 de “evidentemente falsa” una acusación del presidente venezolano de que el vicepresidente Joe Biden conspiró para derrocarlo, y sostuvo que Nicolás Maduro intentaba distraer la atención del mundo de sus abusos a los derechos fundamentales.
El intercambio de ataques socavó las esperanzas de que Washington y Caracas puedan mejorar sus ya deterioradas relaciones. Hace un mes, en Brasil, Maduro y Biden conversaron brevemente y expresaron el deseo de restaurar las relaciones.
En un discurso televisado el fin de semana pasado, Maduro dijo que Biden trató de fomentar el derrocamiento de su gobierno socialista durante una cumbre del Caribe sobre energía que presidió el mes pasado. Según Maduro, el vicepresidente dijo a los jefes de Estado caribeños que el gobierno de Venezuela tenía los días contados y que deberían dejar de apoyarlo.
Lo que hizo Biden “no tiene nombre”, dijo Maduro. “Vicepresidente Biden, míreme a los ojos, dice que Estados Unidos quiere acercarse a América Latina y el Caribe y mire cómo nos atacan”.
La oficina del vicepresidente contestó en un comunicado que Maduro trata de distraer la atención de la situación en Venezuela, con sus reiteradas violaciones a las libertades individuales y el estado de derecho.
La economía venezolana depende del petróleo, y Maduro, que intenta mantenerla a flote a pesar de los problemas crecientes, suele acusar a gobiernos extranjeros, incluido el de Estados Unidos, de conjuras, intentos de golpes de estado y planes para asesinarlo.
“Las acusaciones del presidente Maduro son evidentemente falsas y claramente son parte de un esfuerzo para distraer la atención de la situación preocupante en Venezuela, que incluye violaciones reiteradas de la libertad de expresión, reunión y el debido proceso”, dijo la oficina de Biden en un comunicado.
Semejante retórica contrasta con lo sucedido el mes pasado, cuando Biden y Maduro conversaron el día de Año Nuevo al margen de la ceremonia de juramentación de la presidenta brasileña Dilma Rousseff. Una foto de Biden y Maduro sonriendo cordialmente se convirtió en un meme en Venezuela, y Maduro calificó el encuentro de “cordial”. WASHINGTON (AP)