Por Roberto PELÁEZ
Olvídese de la frialdad de los números, los especialistas consideran que en lo que respecta a remesas México debe recibir este año unos 35 mil millones de dólares, de mantenerse el ritmo de los primeros dos meses del presente año, periodo en que la cifra superó los cuatro mil millones de billetes verdes.
Atención, el mencionado registro anual sería el más alto de los últimos 36 años, y esas remesas influyen en las decisiones políticas y económicas a instancia federal, estatal y municipal.
“A veces he tenido dos trabajos, en ocasiones más horas, en otras menos horas, pero siempre le envío dinero a mi familia, específicamente el Día de las Madres, luego en septiembre para el cumpleaños de mi mamá, y en diciembre por fin de año para que disfruten una comida en familia”, comenta Mario Parra, de Cuernavaca, en el estado mexicano de Morelos.
Alberto González, quien se desempeña como vicepresidente del Colegio de Economistas del Noroeste de México, afirma: “Las remesas que envían los paisanos a sus familiares son fundamentales para la economía nacional, siendo la principal fuente de ingreso para más de un millón cuatrocientos mil familias mexicanas que utilizan dichos flujos para consumo básico”.
Recientemente en el llamado Foro Binacional efectuado en la Universidad de Nevada Las Vegas (UNLV), Miguel Ramos apuntó para los lectores de El Mundo “hay mucho interés en esto del Programa 3x1, porque a quien no le gusta ayudar a mejorar el lugar donde nació, saber que se asfaltan las calles, o se ponen luminarias en la cancha de futbol o se arregla la iglesia, sin embargo es preciso que las autoridades de determinados lugares sean más transparentes, incluso a veces inauguran una pequeña panadería o algo y ni siquiera invitan a dos personas de las que enviamos remesas, eso es algo que hay que mejorar”.
Un vistazo al comportamiento de las remesas enviadas a México en el 2018, permite afirmar que el vecino país recibió 33 mil 480 millones de dólares al cierre del 2018, cifra que le sirvió para ubicarse en la cuarta posición entre los países con mayor captación en el mundo.
González destacó que las naciones que recibieron mayor cantidad de divisas en el 2018 fueron la India con 70 mil millones de dólares, seguida por China 66 mil millones, Filipinas con más de 34 mil millones y México con los mencionados 33 mil 480 millones de dólares. Aquí vale la pena hacer un alto, si las remesas a México continúan como se espera -dado el comportamiento de los primeros dos meses del 2019- entonces será factible dejar atrás los 35 mil millones de dólares y superar a Filipinas, o sea, desplazarla de la tercera casilla. Se trata sin dudas de una excelente fuente de ingresos desde el exterior para ayudar al país.
La guerrerense Miriam Ortiz reconoce las bondades de las transferencias electrónicas para las remesas, “a mi mamá la asaltaron dos veces, ahorita que le puedo enviar el dinero a su cuenta es mucho más seguro, se acabó el robo, aun así, abunda, no deja de ser peligroso, pero mucho menos... estoy más tranquila; mientras mamá y mi hermana estén allá les envío su dinero”.
Sobre este aspecto el vicepresidente del Colegio de Economistas subraya: “Los paisanos requieren su inclusión financiera en el exterior y sus familias en el territorio nacional, con el objetivo de ofrecerles seguridad, economía y rapidez en sus transacciones de remesas familiares, lo que permita evitar robos al migrante y de paso se les ofrezca la posibilidad de enviar dinero a menor costo, tener acceso a crédito, ahorro, inversión y consumo, entre otros servicios”, puntualiza.
“No tenemos porque dudar de que las remesas familiares enviadas a México van a seguir en aumento, a un ritmo ascendente, y en base al comportamiento de la evolución que consideramos, se espera una cantidad superior a los 35 mil millones de dólares al cierre del 31 de diciembre del 2019”, vaticina González.
