Senadores demócratas buscaron boicotear la primera audiencia de confirmación del abogado Brett Kavanaugh como nominado del presidente Donald Trump a la Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos.
Al inicio de la audiencia en el Comité Judicial del Senado, Richard Blumenthal y Kamala Harris pidieron suspender la audiencia bajo el argumento de que apenas recibieron 40 mil páginas de documentos sobre el historial de Kavanaugh.
“Eso hace de esta audiencia una farsa y una burla”, le dijo el senador Blumenthal al presidente del Comité, el republicano de Iowa, Charles Grassley.
Simultáneamente a las quejas demócratas, decenas de manifestantes irrumpieron con gritos en la sesión, donde Kavanaugh se encontraba acompañado de su familia y aplaudieron la propuesta de los demócratas de posponer el proceso de confirmación del nominado.
A pesar de las quejas de los demócratas, el senador republicano Grassley sostuvo que ha habido suficiente tiempo para analizar el historial de Kavanaugh y procedió con el proceso de audiencias, que se espera se prolongue durante al menos tres días.
Antes de la sesión, en las escalinatas de la Suprema Corte, los senadores demócratas del Comité Judicial protagonizaron una protesta en la que pidieron la posposición del proceso hasta que tengan oportunidad de revisar la documentación sobre Kavanaugh.
“No podemos seguir adelante cuando una gran parte de su récord (de Kavanaugh) sigue en secreto”, señaló la demócrata de California Dianne Feinstein.
De ser ratificado, Kavanaugh será el sexto católico en el máximo tribunal de Estados Unidos, así como el cuarto en haberse graduado de la escuela de leyes de la Universidad de Yale.
El líder de los demócratas en el Senado, Charles Schumer, ha acusado al presidente Trump de elegir al juez Kavanaugh como candidato a la Suprema Corte como escudo para la investigación del fiscal especial Robert Mueller sobre Rusia.
El senador por Nueva York aseguró recientemente que Trump eligió a Kavanaugh porque está preocupado de que el fiscal Mueller pedirá al tribunal que el presidente sea citado a responder preguntas sobre la injerencia de Rusia en las elecciones presidenciales.
Kavanaugh, un católico de 53 años que funge como juez de la corte de apelaciones del Distrito de Columbia, fue descrito por políticos liberales como un magistrado dispuesto a dictaminar en contra de los derechos de la mujer y de revertir la Ley de Salud Asequible, conocida como Obamacare.
Kavanaugh, quien aún debe ser confirmado por el Senado, busca sustituir al magistrado en retiro Anthony Kennedy.
En el historial del magistrado destaca su papel como abogado en el equipo legal de George W. Bush que disputó las controvertidas elecciones en Florida a Albert Gore en el 2000 y antes fue uno de los litigantes del fiscal especial Ken Starr por el escándalo inmobiliario Whitewater de Bill Clinton.
A raíz de su participación en duelos judiciales entre conservadores y liberales, el senador demócrata Dick Durbin bautizó a Brett Kavanaugh como el “Forrest Gump de la política republicana”.
La Casa Blanca espera que el nominado del presidente tenga una rápida confirmación en el Senado, donde los republicanos gozan de la mínima mayoría. Washington (NOTIMEX)
