El Consulado de México en Quito inició la atención con cita previa para la solicitud de visados, eliminando las largas filas que se habían registrado, a raíz de la decisión del país azteca de volver a solicitar ese requisito.
Apenas unas 30 personas esperaban en la misma acera donde, cientos de ecuatorianos se agolpaban a la espera de recibir atención, ante la inminente entrada en vigor del requisito migratorio.
México reintrodujo la exigencia con el argumento de que se debía al fuerte incremento de la migración ecuatoriana (7 de 10 no regresaban) y el que muchos pretendieran cruzar a EE.UU. de forma irregular, entre otras razones.
El requisito entrará en vigor este sábado 4, tras casi tres años de exención, y ha cogido por sorpresa a los ecuatorianos que ya tenían pasajes.
SORPRESA EN EL ÚLTIMO MOMENTO
Mayra Paredes contó a Efe que llegó a la legación mexicana desde Ambato, ciudad en el centro del país, pues en julio compró un pasaje con la intención de suscribir un convenio interinstitucional en México para llevar a jóvenes deportistas.
Para obtener su turno, debió pernoctar toda la noche del domingo al lunes junto a la legación, situada en una avenida principal en el centro norte de Quito.
La decisión mexicana también tomó por sorpresa a otros viajeros que tenían planeadas vacaciones en el popular Cancún, como Jonathan Garzón, quien compró pasajes para toda su familia.
“Nos encontramos con la novedad de que empieza la exigencia, estamos haciendo el trámite correspondiente para presentarnos y hacer la solicitud”.
Garzón consideró que para quienes, como él, tenían todo planificado, la decisión de México ha sido “drástica”.
El problema ha sido analizado por los presidentes de ambos países, Guillermo Lasso y Andrés Manuel López Obrador, confirmó el viceministro de Movilidad Humana, Carlos Velástegui.
Dentro del acuerdo al que llegaron, figura la “articulación” de ambos Estados para “combatir el tráfico ilícito de migrantes que afecta a los ciudadanos ecuatorianos y que son parte de esta situación que venimos experimentando”. Quito (EFE)
