El pasado miércoles 22 se celebró el ‘Día Mundial de la Tierra’, y es un aliciente, algo que permite respirar profundo, la mejoría que experimenta el planeta, distante del engorroso momento que encara el hombre.
Las buenas noticias, respecto al planeta, comenzaron a llegar a finales de marzo, cuando un grupo de científicos dio a conocer que el agujero de la capa de ozono disminuía.
En poco tiempo la tierra muestra índices alentadores, y ese es un mensaje que llega ‘alto y claro’, si se cuida... el planeta lo agradece.
Se detuvieron muchas fábricas en China (allí residen más de mil 500 millones de personas), le siguieron, para evitar la propagación del coronavirus, grandes instalaciones en países europeos.
Dicho sea de paso, China y Rusia abogan, alientan la siembra de árboles, ello sin dudas es un respiro. La pandemia y la cuarentena, por su lado, provoca que al menos en Estados Unidos (también con fábricas paradas), transiten menos carros, y por supuesto, disminuye el uso de combustible...
Es, como dijo alguien, como si la tierra se tuviera tomando un descanso, de hecho, desde finales del año pasado a la fecha vive uno de sus mejores momentos. Qué alivio.
Estaba todo tan deteriorado, muchos animales en vías de extinción, sequías prolongadas, deshielo, altas temperaturas, tala de árboles, un medio ambiente enrarecido por el humo y los gases. Ojalá que el hombre haya aprendido la lección, que podamos asegurar que entendemos el mensaje que envía nuestro planeta, y lo que es mejor, dejar a las futuras generaciones una tierra con una salud envidiable.