El sheriff del condado de Maricopa, Joe Arpaio, conocido por su ferrea posición antiinmigrante, expresó su deseo de viajar a México y reunirse con el Papa Francisco durante la visita que el pontífice realizará a ese país a partir de este viernes.
Arpaio informó que se acercó a las autoridades eclesiásticas y consulares para gestionar la posibilidad de un encuentro con el Papa, para pedirle una oración por su esposa Ava, quien en diciembre pasado fue diagnosticada con cáncer.
“Sería bueno para mí, el que tal vez pudiera decirle hola y que tal vez él diga una oración”, dijo Arpaio, en declaraciones este miércoles al periódico The Arizona Republic.
Afirmó que le gustaría hacerle saber al Papa que “tengo corazón”.
Arpaio, de 84 años, dijo que también desea reunirse con el pontífice para compartir sus pensamientos sobre cuestiones fronterizas, incluida la inmigración y la violencia de las drogas.
El sheriff es conocido en Estados Unidos por su posición antiinmigrante, lo que le ha valido ser el blanco de demandas federales por supuesta discriminación racial contra los hispanos.
El Papa Francisco pidió a los líderes mundiales, desde el inicio de su pontificado en marzo de 2013, hacer más para aceptar a los inmigrantes que huyen de la pobreza y la violencia.
En la entrevista con el rotativo, Arpaio reconoció que él y el Papa no pueden ponerse de acuerdo sobre el tema de la migración, porque ambos tienen dos puntos de vista diferentes. “Él representa a todo el mundo. Yo soy un oficial de policía”, dijo Arpaio. Phoenix (NOTIMEX)