Aquí en San Miguel de Allende nos amanecimos con dos noticias por de más agradables, una la de un gourmet de esos que visitan los distintos restaurantes, supuestamente de “incógnitos” para verificar personalmente la calidad de la comida de un restaurante local.
El susodicho “gourmet” se hace llamar G.L. Othón, y escribe su respetadísima columna en el diario Reforma, y esta vez visitó el Hotel Matilda, situado aquí en San Miguel de Allende, y nos llenó de placer y gusto que le pusiera cuatro estrellas a su cocina, lo que significa todo un orgullo sabiendo que el susodicho, generalmente hace polvo los lugares que visita, y en los cuales paga rigurosamente su cuenta para que no exista ninguna duda sobre la calificación que pone a cada establecimiento.
Por eso nos dio gusto que calificara con cuatro estrellas, tenedercitos como es su estilo, la comida del Hotel Matilda diciendo que valió la pena hacer el viaje a San Miguel de Allende. Nosotros pronto visitaremos el lugar para comprobar lo que el susodicho afirma para recomendarlo por nuestra parte.
Al que esto escribe una vez le ofreció un periódico esta clase de crítica, a sabiendas de que yo había trabajado en los mejores hoteles, e incluso ya tenía listo el título de mi columna a la que llamaría “To eat or not to eat... that is the question!”... pero nunca me animé a llevarlo a cabo. Por eso me llamó tanto la atención que este señor viniera hasta San Miguel de Allende... y porque ahora ya tenemos un sitio seguro para recomendar, en donde se puede degustar de la buena mesa.
¡TODOS CON HILLARY!
Bueno, pero de lo que pensábamos escribir es que aquí en San Miguelito ya está dando los primeros pasos el Partido Demócrata, al cual orgullosamente pertenezco, para organizar las mesas de apoyo... ¿a quién? pues nada menos que a Hillary Clinton, a la que la última vez se le escapó la presidencia de EUA por un pelito, pero más que todo por la súper bien organizada campaña de Barack Obama, quien terminó siendo un buen presidente, a pesar de todos los obstáculos que le presentaron los republicanos, que no fueron pocos, pero que afortunadamente, dando una muestra de civismo, el pueblo americano nunca se metió con su color, lo cual fue una primicia digna de una alta democracia. Pues bien, ahora le toca a la primera mujer, y su nombre es Hillary, la cual, como lo vemos hasta ahora, no tiene ningún rival de peligro en el camino. ¿O usted qué cree? Pues en la política todo puede suceder.
A la señora experiencia le sobra, por haber sido no solo Secretaria de Estado del actual presidente, sino por tener carisma y poder ser un gobierno de 2 x por uno.
LOS CANDIDATOS REPUBLICANOS... NO MUY FUERTES
Pues de los tres que hasta ahora han hecho más ruido, Jeb Bush es el único con posibilidades, primero por ser miembro de una dinastía de la cual ya dos han ocupado la Casa Blanca, pero ambos han sido más bien beligerantes, el primero y padre de todos ellos, nos dejó como recuerdo la infame guerra de Nicaragua, en donde en compañía del nefasto coronel Manuel A. Noriega de Panamá y Daniel Ortega, hasta la fecha en el poder, inició la guerra (de las drogas) en Centroamérica, que han dejado de herencia el famoso tren llamado “La Bestia” que no deja de transportar en su lomo a miles y miles de centroamericanos, muchos de ellos, ya refugiados en México, y cientos de ellos reclutados a “güevo” por las bandas de narcotraficantes.
Y el segundo Bush, causante de las guerras en el medio oriente, despilfarrando el superávit que dejó el presidente Bill Clinton, que aunque cachondo, es uno de los mejores presidentes que ha tenido Estados Unidos.
JEB BUSH
El único que podría hacer mosca a nuestra Hillary, en mi humilde opinión, es el tercero de la dinastía Bush, de nombre Jeb, primero por hablar español fluidamente, pues tuvo estudios en la Ciudad de León, aquí al ladito, en donde contrajo nupcias con su esposa mexicana, de nombre Columba Garnica Gallo, quien goza además de ser muy carismático y ser el más equilibrado de los Bush, por lo que puede fácilmente jalar el voto latino, como lo hizo en Florida.
De los demás que hasta ahora han dado la cara, Graham Lindsay, republicano de South Carolina, y Berney Sanders, republicano de Vermont, por ahora no hay que preocuparse, igualmente que de los dos cubanitos Ted Cruz y Marco Rubio, los cuales han mostrado las uñas y su falta de cancha política demasiado pronto. Carencia de experiencia, pues. Y en cuanto a nuestra Hillary, aparte de ser ella toda una leona despierta, no hay que olvidar que con el marido que tiene detrás puede formar una mancuerna de 2 x 1, muy, pero muy difícil de vencer, si en verdad lo que se busca es un patriotismo verdadero y lo mejor de lo mejor para el país.
LA INJUSTICIA EN TODO SENTIDO
Por último y para terminar con algo que está de moda como lo es la llamada “Pelea del Siglo”, términos inventados por Don King, pues sabemos que ni es del siglo sino una forma más de exprimirle el billete a los miles de villamelones que se dejan llevar por la publicidad, pues todos sabemos quién va a ganar, y sin despeinarse, porque ni pelo tiene, con perdón de mi amigo Rafaelito.
Lo triste dentro de esta terrible mercadotecnia, es que aquí en México, un luchador de nombre “Hijo del Perro Aguayo”, calló muerto entre las cuerdas y se reveló que los luchadores, a veces hacen el espectáculo por sueldos tan miserables como $1,000, según lo revelaron ellos mismos. Mientras los de la “Batalla del Siglo” se embuchacarán millones. Lo mismo sucede con los gladiadores o como se llamen a lo que se suben a esos rings en forma octagonal y de veras se parten la madre a puño limpio por unos miserables dólares. Esa es la justicia de la vida. Así que solo nos queda, mientras tanta mierda sucede... seguir Corro... borando.
