Las cuentas claras
¿Le gusta declarar los impuestos? ¿Qué alguien sepa cuánto devengó en el año, en qué gastos considerables incurrió? Es muy probable que su respuesta sea negativa. Sin embargo por encima de todo hay que respetar las leyes y las de este país establecen que es menester declarar los impuestos.
‘De la muerte y los impuestos nadie se salva’ es una manera de reflejar la obligatoriedad de cumplir las leyes, y en esta oportunidad es preciso, oportuno volver sobre el tema pues el próximo miércoles 15 finaliza la temporada para declarar los impuestos... entonces, si no ha hecho su declaración ¡apúrese!
Sin embargo, como bien dicen especialistas del Internal Revenue Service (IRS, por sus siglas en inglés) que el apuro, el dejar las cosas para el último momento, no le lleven a cometer errores o no prestarle a la declaración de impuestos la importancia que tiene, la seriedad y transparencia que exige, algo en lo que coinciden preparadores experimentados en el valle.
Si ya sacó cuentas y debe pagar al IRS, entonces debe apurarse aún más, se le acaba el tiempo, no eche el consejo en saco roto, pues los días pasan rápido y se puede hacer acreedor de una multa o verse en la necesidad de pagar recargos.
Sin embargo el IRS no es inflexible, o sea, no cierra las puertas de un tirón, ofrece consejos en su página, brinda opciones, da la posibilidad de prorrogar la declaración, pero hay que contactarlo, solicitar dicha extensión en tiempo...
Usted muestre apego a las leyes, haga su declaración. Recuerde: lo mejor es “cuentas claras y el chocolate espeso”.
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El abstencionismo electoral
Acaba de concluir una etapa de las elecciones municipales. Casi todos los candidatos a reelección fueron retenidos pero con muy pocos votos; llama la atención la baja votación. Cierto que es una elección pequeña pero debe alertar al electorado porque el próximo año habrá que salir a las urnas otra vez, cuando se elija nuevo presidente.
Según se reporta en esta edición, con base en la información preliminar de la autoridad electoral del Condado de Clark, de los casi 420 mil electores registrados en el condado apenas ejerció su voto un 13.75%.
Ahora que separados por ciudad Las Vegas arrojó un 15.67% del total de votantes. Fue el más alto si se compara con las otras ciudades: Henderson 11.81%, y North Las Vegas 9.38%.
¿Muy baja votación no le parece? Y eso que antes se criticaba a países subdesarrollados por su alto abstencionismo.
Está claro que son elecciones municipales y que la candidatura más prominente fue la de la alcaldesa Carolyn Goodman; o sea que se trata de un proceso electoral pequeño, ese sería el pretexto para responder a la pregunta ¿por qué tanto abstencionismo electoral?
Alguien puede decir “pero ya vendrán las elecciones presidenciales del 2016 y ahí sí que la gente va a salir a votar”. Pues ojalá sea así. Pero esa afirmación es especular ante lo que se ve con esta elección local.
¿Sin el factor presidencial, qué pretexto puede tener el votante para no ejercer ahora y pensar que sí lo hará en el 2016?
