Dramático caso de los niños que llegan a la frontera de México con Estados Unidos, miles y creciendo el número, la mayoría desde Guatemala, El Salvador, todo por rumores plantados por personas sin escrúpulos, el rumor difundido, que a los niños habrá que llevarlos a la frontera de México para luego pasarlos a como de lugar al Norte, ¿por qué? Porque la administración del presidente Barack Obama ofrece un programa de asistencia y recepción para niños, un verdadero caso de mentira que a falta de esperanza del futuro de vida para estos niños, padres irresponsables o de hecho responsables a bien deseando lo mejor para sus hijos quieren creer en estos rumores o son engañados y enganchados por los llamados coyotes.
Solo imaginarse uno la desesperación de millones de familias por el bienestar de sus hijos, aunque se hace mucho hoy en día por gobiernos latinoamericanos y se atienden a millones de familias y a sus hijos, no hay dinero suficiente para programas de apoyo social, la cifra de nacimientos continúa creciendo, no así las condiciones de oportunidad para millones de habitantes desde México hasta Argentina, un verdadero problema social que al final del día resulta en más migración hacia esta Nación.
Podemos culpar y hemos hablado de esto, a quién hacer responsable, ¿a Estados Unidos por no abrir fronteras para millones de ciudadanos y familias en extrema pobreza, a las naciones de Latinoamérica por históricamente no crear sistemas de gobierno que generen suficiente economía, empleo, oportunidades de educación, de bienestar?
Los niños migrantes hoy han abierto un asunto de prioridad internacional, el presidente Obama está tratando ya el asunto con mucha atención, estos niños solo revelan que los programas sociales con nombres y títulos que dan la esperanza de solución a la pobreza, y sin duda la buena intención y voluntad de presidentes de países como México, Guatemala y otros, son loables esfuerzos pero que difícilmente ofrecen una solución de fondo por ser problemas de pobreza extrema que datan de más de 100 años de expansión.
Reconocer a miles de organizaciones sociales que ofrecen ayuda, a miles de buenos ciudadanos de la frontera que están a diario, como el caso de un Sergio Tamai y toda su familia, por citar un ejemplo de alguien que toda su vida ha tenido a bien apoyar y que sin duda hay muchos más que por años están pendientes de las necesidades de migrantes deportados hacia la frontera de México, sin embargo hoy lo más triste y frustrante que hemos visto, son a miles de niños que terminan en un mar de desesperación.
Urge la creación de fuentes de trabajo, la erradicación de la corrupción, más economía positiva, claro que llegamos con estas opiniones a más retórica que solo repetimos lo que ya sabemos, sin embargo los niños hoy envían un dramático y claro mensaje, hay desesperación, ¿de quién? DE MILLONES DE FAMILIAS, hará falta un Plan Maestro Económico para generar empleo y más bienestar, ¡o estallará la olla de presión social en Latinoamérica!
¡Ánimo!
Xavier@rivas.com
