Estados Unidos y Argentina lideraron este jueves 26 de septiembre un foro internacional en Nueva York para abordar la crisis política venezolana y “hacer oír la voz” del pueblo en el país caribeño, después de que Nicolás Maduro se autoproclamase vencedor de los comicios del pasado mes de julio.
“Si hoy tenemos un objetivo único, ése es garantizar que la voluntad y los votos del pueblo venezolano sean realmente respetados y que puedan determinar su propio futuro”, afirmó el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, al inicio de esta cumbre.
El encuentro, al que asistieron más de una treintena de delegaciones internacional y del que saldrá una declaración conjunta, iba a estar comandado en un principio por Chile y Uruguay pero días atrás esta opción se desbarató.
Otros países latinoamericanos como Brasil, Colombia o México, con gobiernos de izquierdas y que mantienen abiertos canales de comunicación con el Gobierno de Venezuela pese a sus críticas al desarrollo de las elecciones pasadas, han decidido no sumarse a la reunión de alto nivel de hoy.
Y es que el cariz ideológico del Ejecutivo argentino ( muy escorado en una postura anti-Maduro), como coorganizador del foro ha contribuido a que otras naciones sudamericanas declinaran la invitación.
Blinken resaltó que Maduro “manipuló los resultados” para “aferrarse al poder” y dictó “injustamente” una orden de detención contra el candidato opositor Edmundo González, exiliado actualmente en España.
Y reincidió: “El pueblo venezolano ha hablado. Nuestro trabajo consiste en garantizar que sus voces sean escuchadas”.
Como representante de Argentina para este encuentro, que se celebra en los márgenes de la semana de Alto Nivel de la ONU, asistió la canciller Diana Mondino, quien se mostró más beligerante contra el régimen chavista.
“Venezuela con Maduro no es Venezuela. Él controla las reservas de petróleo y quiere expulsar a los venezolanos de su propio país (...) Está llevando a cabo un plan sistemático de desapariciones forzadas, torturas y homicidios”, aseveró Mondino.
La titular de Exteriores argentina pidió así un esfuerzo colectivo para “encontrar el camino que traiga luz” a los venezolanos, consiguiendo que “no pierdan la esperanza”.
“Hay muchos sitios con problemas e incluso guerras. Pero esto es diferente, es un conflicto autoinfligido por un gobierno en concreto”, recalcó Mondino, quien advirtió que se necesita hacer más porque Maduro “no leerá declaraciones como esta”, en alusión a la que se suscribirá hoy.
De hecho, el canciller chavista, Yvan Gil, intervino ayer ante la Asamblea General de Naciones Unidas culpando a la oposición venezolana -aunque no mencionó a González ni a María Corina Machado- de promover el terrorismo y de fungir como satélite de EE.UU. en su país. Pero en ningún momento se refirió a la declaración que se suscribiría hoy.
Entre las delegaciones que asistieron al encuentro de alto nivel de hoy se encontraban un gran número de países europeos como España, Italia, Alemania, Francia o Portugal, así como el alto representante de Asuntos Exteriores de la UE, Guatemala, Uruguay, Paraguay, Japón o Marruecos (único país africano o árabe). Nueva York (EFE)