Estados Unidos señaló haber recibido con preocupación el anuncio del cronograma electoral venezolano y reiteró su compromiso en favor de unas elecciones competitivas e incluyentes.
Un portavoz del Departamento de Estado señaló a EFE que la Administración de Joe Biden está preocupada por el anuncio del Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela sobre las elecciones de este año, que en su opinión llega “en medio de una dura represión contra la oposición democrática y la prohibición de que 15 candidatos compitan”.
El país celebrará sus presidenciales el 28 de julio. El cronograma recoge que las presentaciones de los candidatos serán del 21 al 25 de marzo y apunta que la campaña electoral, que tendrá 21 días de duración, se desarrollará entre el 4 y el 25 de julio.
“Estados Unidos mantiene su compromiso con el diálogo constructivo y con unas elecciones competitivas e inclusivas, y hace un llamamiento a Nicolás Maduro y a sus representantes para que cumplan los compromisos recogidos en el acuerdo de la hoja de ruta electoral de Barbados”.
El pacto alcanzado allí en octubre del año pasado entre el gobierno y la principal coalición opositora, según recordó el portavoz, incluye entre sus compromisos “invitar inmediatamente a observadores electorales de la Unión Europea y de otros países, permitir que se presenten todos los candidatos y llevar a cabo una actualización exhaustiva del registro electoral”.
Asimismo, aboga por “liberar a más presos políticos” y permitir la libertad de movimiento a todos los candidatos para que puedan hacer campaña.
La exdiputada María Corina Machado, elegida como candidata presidencial por la mayoría opositora, continúa inhabilitada para desempeñar cargos de elección popular y, por tanto, no podrá inscribirse entre en el período establecido por el CNE.
“Seguimos de cerca la situación y continuaremos trabajando para apoyar la aspiración de los venezolanos a una Venezuela más democrática y estable, en estrecha consulta con la oposición democrática”, se concluyó desde Washington.
Esta mismo martes Biden prorrogó por un año más la declaración de “emergencia nacional” respecto a Venezuela dictada en 2015 por considerar que la situación en ese país representa “una amenaza inusual y extraordinaria” para la seguridad nacional estadounidense.
Venezuela respondió a esa decisión asegurando que el país, con el que no tiene relaciones diplomáticas desde 2019, es un “rehén” de sus “propias políticas de agresión” que, en su opinión, consisten en la imposición de sanciones y bloqueos. Washington (EFE)