Por Roberto PELÁEZ
Hay una mujer al principio de grandes cosas.
Alphonse de Lamartine
Si al Primer Encuentro de Escritores (diciembre 10 de 2022) asistieron en calidad de invitadas 12 mujeres con libros publicados, la cifra crece de manera significativa para la cita del próximo 18 de este mes.
En esta oportunidad pasan de 20 las autoras (entre mujeres y hombres serán 34), lo que deja sentado la fuerza del movimiento literario y lo que es mejor el empuje que protagonizan las féminas.
Las laureadas Xinia Estrada, Janina Pérez, Claudia Contreras, Erendida Gonzales, Rosa Íñigo encabezan un listado en el que también sobresalen Alba Arango, Hergit Llenas, Maritza Maldonado, Cory Ordóñez...
La comunidad hispana debe sentir un sano orgullo por cada una de las escritoras asentadas en el valle, por su obra, por lo que han consegudo hasta hoy -que conste es solo el comienzo-, reitero, lo mejor está por venir.
Sayra Torres, Dulce Sol, Sandra Azofeifa, Irene Medina, Lily Tejeda, María Calderón, Pily Coblentz, Lérida Torres, Mónica Prado, Didi West, Claudia Bonet, Victoria Guadrón y Azeneth Marrufo, tienen de qué presumir, ahí está su obra literaria, con más o menos libros publicados, con mayor o menor calidad -no me corresponde a mí juzgar ni opinar sobre el tema-, por eso serán reconocidas el venidero 18.
Que conste, en el valle hay otras escritoras, a ellas también mi respeto y admiración aunque no aparezcan en esta oportunidad entre las invitadas. Ya lo dijo alguien, hay más tiempo que vida. Vendrán de seguro otros eventos.
Si embargo sería injusto ensalzar a las autoras, a las mujeres con libros publicados, reconocimientos a instancia local, nacional, e incluso internacional, y no traer a colación a otras que al momento de redactar estas líneas no cuentan con un ejemplar físico de su autoría.
Es digno de resaltar la labor de Mapy Durán y el grupo Comala, de Selena Lozada, prestas siempre a ayudar, alentar, impulsar; no es descabellado considerar que un día (más temprano que tarde) nos regalen una agradable sorpresa. Por el momento reconocemos, admiramos, agradecemos su hermoso y admirable trabajo en pos de la cultura, de que cada vez cobre más auge la literatura. Cuando se escriba la historia de este movimiento, sus nombres deben aparecer en un sitio prominente, se lo han ganado por derecho propio. Gracias.
Por lo pronto el II Encuentro Internacional (participan escritores de 11 países) se acerca a pasos agigantados. Corresponde a los autores, a sus familiares, amigos, conocidos, admiradores, las autoridades, hacer de este evento algo por lo que cada uno de nosotros estemos orgullosos. La mejor manera de decir es hacer. Aportemos entonces eso que nos distingue: el amor.
Que cada uno de los participantes considere la actividad del 18 como algo suyo.