El gobernador de California, Gavin Newsom, prometió blindar el aborto en la Constitución del estado, anticipándose al posible fallo del Tribunal Supremo que retiraría la protección al mismo en EE.UU., según un borrador filtrado por el diario Politico.
La intención de Newson y de la mayoría de legisladores de California, un estado de abrumadora mayoría demócrata, es aprovechar las elecciones de medio mandato del próximo noviembre para incluir en la papeleta una enmienda constitucional que protegería el aborto en su territorio, y que debería ser aprobada por los electores.
"California no se quedará de brazos cruzados mientras se despoja de sus derechos a las mujeres de todo Estados Unidos y se borra el progreso por el que tantas han luchado", insistió Newsom en un comunicado que también firmaron los líderes de la Cámara y el Senado estatales.
Los progresistas tienen una mayoría suficiente en ambas cámaras para introducir la pregunta sobre la enmienda en las elecciones del 8 de noviembre.
California, el territorio más poblado de EE.UU. con 39 millones de habitantes, es uno de los estados más permisivos con el derecho al aborto, aunque no está protegido directamente en su Constitución y su regulación se enmarca en una enmienda a la privacidad personal que se introdujo en 1972.
A este estado suelen acudir mujeres para interrumpir su embarazo desde otros territorios del país, donde se han aprobado leyes restrictivas como en Texas y Misisipi.
De hecho, Newsom ya propuso una decena propuestas sobre el aborto el pasado diciembre, con el objetivo de convertir a California en un "santuario" para las mujeres de Estados Unidos que no puedan hacerlo en sus estados.
Estados Unidos vivió una jornada de lo más convulsa tras la filtración de un borrador de sentencia del Tribunal Supremo que de salir adelante eliminaría la protección del derecho al aborto vigente desde 1973 y permitiría a los estados prohibir las interrupciones del embarazo.
El borrador, publicado por el portal Politico a última hora del lunes, cuenta con el apoyo de por lo menos cinco magistrados del Supremo -es decir, de la mayoría de los 9 jueces que lo componen- y su autenticidad ha sido confirmada este martes por el propio tribunal.
Las reacciones a esta noticia han ido desde la sociedad civil, con protestas convocadas en varias ciudades -incluida una en Washington frente al Supremo-, hasta los principales cargos políticos empezando por el presidente, Joe Biden, quien adelantó que su Gobierno está preparando una "respuesta" para defender este derecho. Los Ángeles (EFE)