Editorial: Navidad, para pasarla bien y reflexionar

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Este es el mensaje de navidad: nunca estamos solos.

Taylor Caldwell

 

¡Llegó la Navidad! El evento que millones de personas esperaban está aquí, es este sábado 25. Junto al ‘Día de Acción de Gracias’, dos jornadas hermosas, significativas, propicias para reunirse y celebrar en familia, pasar una velada para el recuerdo. No le falta razón a quienes aseguran que la Navidad tiene el bello e inigualable poder de reunir, de juntar a los familiares y amigos, a los vecinos, de ofrecer comida a éste y aquel. Paso a la amabilidad. 

Sin dudas, mejor que todos los regalos debajo del árbol navideño, es la presencia de una familia feliz; no falta por supuesto quien quiera reflexionar sobre lo sucedido en el año que concluye y elogie el ponche de mamá. Atrás queda otro año complejo. Es un buen momento para dejar, los teléfonos a un lado, por un rato.

De la Navidad se ha escrito y platicado mucho, es el momento excelente para reunirse. La escritora estadounidense Josephine Daskam afirmó con sobrada razón: “en diciembre el amor pesa más que oro”.

Esta del sábado 25 es una celebración hermosa, como sólo puede serlo una fecha en que se une todo el mundo alrededor del amor y la generosidad; se pueden perder muchas cosas, sin embargo lo hermoso de la Navidad pervive: las luces, los colores, el brillo, la alegría, el estado de ánimo, los abrazos, los recuerdos de infancia, el cariño...

Los buenos motivos para celebrar y ser partícipes de la fiesta navideña, fungen como un común denominador, compartir las tradiciones familiares, dar y recibir amor, alimentar el espíritu, sin perder de vista los conocidos valores que trae consigo la Navidad y que pasan por la humildad, la generosidad, el amor y la esperanza, reconciliación, gratitud

Es como si la Navidad tuviera una varita mágica y repartiera todo lo hermoso de la fecha, la alegría, el amor, encendiera con su chispa la chimenea de la alegría, del cariño y la amabilidad, con la mayor sencillez del mundo prendiera en todos el deseo de dar, de compartir, de abrazar y querer. Ninguna día como el Navidad. Es la fecha en que se unen todos los tiempos.

El ‘Día de Acción de Gracias’ y el de Navidad clasifican como de los más hermosos del calendario, por lo que significan, la ‘carga’ de amor que traen aparejados; el primero, como su nombre lo indica, convoca a agradecer, a dar gracias por la salud, la familia, el trabajo, los buenos amigos...

La Navidad es una fecha marcada por los regalos, dulces, reunión familiar, a ello se une la voluntad de ser mejor como ser humano, reconocer cuánto se puede hacer por la mejoría del entorno, de la convivencia social, de ayudar a quienes tienen menos, todo ello en medio de los villancicos, del árbol lleno de luces, de la alegría y los abrazos, es la ocasión excelente para sacar a flote lo mejor de cada uno, asegurar con júbilo: ¡llegó la Navidad! Ahora sí, abran los regalos. Sean felices. 

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