Una jueza federal dictaminó que el distrito escolar de Florida donde un exalumno mató a 17 personas en 2018 en una secundaria no tenía la responsabilidad de advertir a los estudiantes y profesores sobre el peligro que representaba el agresor, Nikolas Cruz, detenido y pendiente de juicio en el condado Broward.
"El distrito no tenía control sobre Cruz", señaló la jueza Patti L. Englander Henning, en respuesta a una demanda interpuesta por padres de las víctimas, recoge el diario Sun Sentinel.
La demanda también incluye a Cruz y a la Oficina del Alguacil del condado de Broward, donde ocurrieron los hechos el 14 de febrero de 2018.
"No tenían la custodia de él. No era un estudiante del sistema y no lo había sido durante más de un año. De hecho, se le negó el acceso al campus una vez que dejó la escuela. El distrito tampoco tenía conocimiento previo de una amenaza definitiva de Cruz", añadió la magistrada.
Entre los demandantes se encuentran Andrew Pollack, padre de la víctima mortal Meadow Pollack; Fred Guttenberg, padre de Jaime Guttenberg, que también murió, y el sobreviviente Anthony Borges, quien recibió un disparo durante el tiroteo.
Tras la decisión, Alex Arreaza, abogado de Borges, afirmó que el fallo "pone a todos los niños en peligro".
Cruz, que enfrenta la pena de muerte, había sido expulsado de la secundaria Marjory Stoneman Douglas por motivos disciplinarios y poseía un arsenal en la casa de la familia con la que vivía desde que murió su madre adoptiva.
En diciembre pasado, los abogados defensores de Cruz, autor confeso del tiroteo que costó la vida a 17 alumnos y profesores en la secundaria, afirmaron no estar listos aun para el juicio en una audiencia virtual con la jueza del caso.
Los abogados dijeron que a causa de la covid-19 no pueden conseguir que expertos en salud mental vayan a la cárcel para evaluar a Cruz y es impensable hacerlo de manera virtual.
Cruz, que tiene ahora 22 años, fue detenido el mismo día del tiroteo y confesó a la policía haber disparado con un fusil de asalto. Antes de la matanza había recibido tratamiento psiquiátrico durante un tiempo en una clínica. Miami (EFE)