Cuando a finales de junio el gobernador Steve Sisolak dio a conocer una directiva de emergencia que exigía el uso de mascarillas en los lugares públicos, muchas personas se preguntaron si se podría fumar en los casinos, entre ellas turistas que acarician la posibilidad de volver a Las Vegas.
Semanas antes algunos hoteles y casinos habían solicitado a jugadores y espectadores que se abstuvieran de fumar en las mesas de juego y sus alrededores, a fin de proteger la salud.
Está claro que la decisión de exigir el uso de mascarillas en lugares público como algo obligatorio, llevó al personal de muchas compañías al análisis y la adopción de medidas dirigidas sobre todo a quienes participan en juegos de mesa y otros.
Resulta evidente que los profesionales de la salud instan a no fumar en el interior de los casinos, al menos durante la afectación por el Coronavirus.
Vale significar que algunos casinos han hecho más rígidas las reglas para los fumadores, específicamente desde que la pandemia ‘golpea’ de manera significativa, aumentan los casos reportados, el número de contagiados y fallecidos.
La adopción de medidas en relación a si se puede fumar o no en los casinos ha estado vinculada a las indicaciones emitidas por el gobernador y las autoridades de salud.
El propio gobernador precisó que en lugares públicos se podían quitar el cubreboca para comer o beber, sin embargo la preocupación está enfocada en preservar la salud, y los casinos -atractivo de miles, millones de personas-, junto a la imposibilidad de fumar con la mascarilla puesta.
