• El artista empezó a crear máquinas y una de las piezas que pintaba era de esqueletos en la playa que acumulaban arena para crear dunas y proteger al país del nivel del mar
Con motivo de la inauguración del Museo Materia del Centro de Ciencias de Sinaloa, el artista holandés Theo Jansen ofreció una plática en torno a su obra de animales y criaturas monumentales.
Durante la charla, previo a la exposición “Las bellas criaturas de Theo Jansen”, que tendrá un recorrido para medios de comunicación el lunes 27 y la inauguración oficial el martes 28 de enero, relató que su vida inició desde el momento en que estudió física en la universidad de su país.
“Por siete años intenté convertirme en un físico o un ingeniero, pero no era un estudiante muy bueno, por lo que pasé todo mi tiempo pintando y dibujando, y luego de siete años de estudio decidí no estudiar física y convertirme en un artista plástico”, refirió.
Jansen recordó haber pintado durante mucho tiempo, y después, cuando de nuevo llegó la tecnología a su vida, le nació “una pasión por ésta y regresó a ella porque quería crear una nave voladora”.
Tiempo después creó una enorme nave y lanzó su obra encima de la ciudad donde vivía; “debo decir que era un cielo con mucha neblina, por lo que mucha gente vio un disco negro volando y realmente creyó que era un OVNI; eso pasó por televisión y fui famoso por un par de meses en mi país, en 1980”, dijo.
“Empecé a crear máquinas y en 1990 una de las piezas que pintaba era de esqueletos en la playa que acumulaban arena para crear dunas y proteger al país contra el nivel del mar; era como una fantasía, y un par de meses fui a la ferretería y compré tubos que se usan para el cableado, y ahí empezó la pasión por las criaturas monumentales”, concluyó.