La actriz Angélica Aragón atribuye la caída de la industria de la televisión a los malos contenidos y la vulgaridad que ha retratado en los melodramas durante los últimos años.
“La industria de la televisión la hemos perdido”, aseguró la actriz, y agregó que la telenovela era una industria netamente mexicana, "desde el guion, los actores, teníamos presencia en más de 120 países a través de los melodramas, y promocionaban a nuestro país en todos sentidos, no solo en el turismo”.
En declaraciones a la prensa, señaló que hace unos años, cuando hizo la telenovela Todo por amor con Fernando Luján, los entrevistaban en español gente de Tel Aviv, porque deseaban aprender español en Israel y poder seguir las telenovelas sin subtítulos.
“Ese era el impacto que tenía la televisión con el melodrama casero, más allá de las ventas y el dinero que generaba para el país, hoy en día nadie quiere ver una telenovela mexicana porque también ha permeado en la televisión la vulgaridad”, resaltó la actriz.
En su opinión, la caída del melodrama se debió a no querer invertir en historias originales y buenos escritores, además de que todas las telenovelas originales de los años 60, fueron escritas por mujeres.
Indicó que en aquel entonces las plumas de Caridad Bravo Adams y Fernanda Villeli, y después Maria Zarattini, entre otras, predominaban y era muy poco lo que se reversionaba como fue el caso de la historia peruana Simplemente María de 1979.
“Creo que cuando se quisieron ahorrar la parte de los escritores y trajeron adaptadores, que con las historias probadas hicieron una especie de ensalada y desde una perspectiva masculina, se perdió”, señaló la actriz, quien además dijo que con la llegada de las plataformas de "streaming" se abrió una gran variedad de opciones.
La hija de José Ángel Espinoza "Ferrusquilla" destacó que ella se ha alejado del género de los melodramas, al igual que el público que prefiere ver telenovelas turcas de hace 10 años, que las mexicanas, y dijo que actualmente se ha enfocado a las series; recientemente hizo una en España con Elena Anaya que se llama Madre, padre, hijo.
Además, la actriz comenzó esta semana el rodaje en Sonora de la cinta Infelices para siempre, en la que trabaja con Adrián Uribe y Consuelo Duval, bajo la dirección de Noé Santillán. La historia aborda los problemas de una pareja, luego de varios años de relación, en donde todo ha terminado por el desgaste, incluyendo el amor.
Angélica Aragón inició su carrera en 1970 en el ámbito teatral, sin embargo su llegada a la televisión fue un año después con la telenovela El amor tiene cara de mujer, que marcó el principio de muchas más que realizaría, entre ellas, Mirada de mujer, que fue un parteaguas en los melodramas mexicanos.
Mientras que en cine debutó con el chileno Alejandro Jodorowsky en La montaña sagrada de 1973. La actriz estudió teatro y danza durante siete años en la London Academy of Music and Dramatic Art, una de las principales escuelas de teatro británico. México (NOTIMEX)