Con el propósito de aumentar su producción, investigadores y estudiantes de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), desarrollaron una serie de controles electrónicos para mejorar las condiciones de los invernaderos de jitomate.
Este tipo de desarrollos contribuirá a que los agricultores puedan obtener tecnología robusta a bajo costo, ya que en la actualidad los invernaderos nacionales tienen un grado de tecnificación bajo.
De acuerdo con un comunicado, al utilizar este tipo de tecnología, se produciría más del 50 por ciento de jitomate, ya que los invernaderos no tecnificados, en promedio obtendrían 40 kilogramos por metros cuadrado, en cambio, con sistema de control automático lograrían cerca de 90 kilogramos por metro cuadrado.
“Nos fundamentamos en la teoría de control óptimo para lograr una señal de referencia, la cual nos indica el nivel de temperatura que debe existir dentro de un invernadero, dependiendo de su tamaño. Mediante los adecuados sensores podemos obtener información de la misma, por ejemplo, si el ambiente está muy frío en comparación con el que nos indica nuestra señal”, detalló el investigador José Eligio Moisés Gutiérrez Arias.
Este sistema regula el flujo de gas del calentador con el fin de aumentar la temperatura del agua al interior del invernadero para alcanzar el nivel óptimo; el sistema de control activará de manera automática el proceso de calefacción mediante una válvula neumática, claro, si el sistema detecta que se debe subir la temperatura.
A diferencia de los sistemas de control existentes en el mercado, éste es óptimo ya que los existentes no optimizan los recursos que se requieren para lograr los rangos de temperatura para los cultivos, mientras que este nuevo sistema sí lo permite.
Por otro lado, el diseñador de los sistemas de control para la temperatura, el egresado de maestría en Ciencias de la Electrónica, Erick Córdoba Gutiérrez, detalló que para obtener los máximos beneficios con el mínimo consumo de energía, se aplicaron técnicas de manipulación matemática.
“Hicimos pruebas comparativas del cuerpo de la planta (masa seca), ésta crecía hasta unos 740 gramos por metro cuadrado sin ningún tipo de control y con nuestra intervención superó los 820 gramos, aproximadamente”, dijo.
Además, en el caso que se detecte exceso de calor en el invernadero, se creó un sistema de control, por medio de sensores, para abrir o cerrar las ventanas de manera automática hasta nivelar la temperatura en su interior.
Los investigadores también trabajan en alternativas para generar dióxido de carbono a bajo costo y regular su flujo dentro del invernadero, ya que este gas es esencial para el proceso de fotosíntesis, cabe aclarar que no es el único gas que se produce, por lo que el reto es purificar los contaminantes en el ambiente.
Otra línea de investigación de la BUAP es implementar iluminación adecuada a las plantas, esto al automatizar la cantidad de luz óptima para el invernadero, con lo que se permitiría continuar con el proceso de fotosíntesis de las plantas por las noches, a falta de luz solar. México (NOTIMEX)