Por León MALMED (Sobreviviente del holocausto)
Traducido por Ángel SANDOVAL
En los últimos 18 meses hemos sido testigos de una situación caótica e impredecible que empeora todos los días.
Se han tomado y aun se toman diario decisiones con consecuencias desastrosas a largo plazo. Puestos importantes que van a afectar a nuestro país por décadas se están llenando con personas incompetentes y motivadas por la avaricia a las cuales casi no se les hizo una verificación de antecedentes.
La anulación de las políticas de la administración previa por odio personal de Donald Trump al presidente Barack Obama tendrán consecuencias terribles para nuestra economía, nuestras relaciones exteriores, nuestro medio ambiente, nuestro sistema de salud y nuestra educación.
Cuando escuché del fiasco ocasionado por el trato a inmigrantes ilegales en nuestra frontera sur, la separación de los niños de sus padres, me llevó a recordar el 19 de julio de 1942, 76 años atrás.
Yo tenía 4 años y medio cuando la policía francesa y los nazis me arrebataron a la fuerza a mis padres. Sí, 76 años más tarde, aun los extraño.
Este es mi primer y único recuerdo de ellos.
Nunca me hubiera imaginado, ni en mis peores pesadillas, que vería repetirse lo que experimenté hace años, hoy en día, en este país que amo demasiado.
Es inconcebible que nuestro gobierno, que ha sido el ejemplo de la democracia para el resto del mundo, sin pensarlo dos veces, pueda concebir un plan tan horrendo; un plan que separa a los niños de sus padres para desalentar a otros a recorrer ese camino tan peligroso hacia la esperanza y la libertad.
Para aumentar lo inmoral de este hecho, los niños han sido/están siendo retenidos en jaulas no por una noche, sino por días, semanas y meses. Las personas incompetentes, crueles e inconscientes -tipo nazi- realizadores de tan malévolos actos, ni siquiera mantuvieron un seguimiento de sus actos de maldad. Algunos de estos niños podrían nunca ser reunificados con sus padres legales.
¿Cuáles son los siguientes pasos que encontraremos con la continua degradación de la moral de nuestro gobierno?
En los últimos dos años, hemos sido testigos de una guerra en los medios de comunicación; valientes medios de comunicación haciendo la difícil tarea de reportar los hechos verdaderos a pesar de las constantes barreras que aparecen en el proceso.
Hemos sido testigos de una guerra contra los políticos y antiguos trabajadores del gobierno hablando sobre las indignantes mentiras escuchadas día a día.
Los daños infligidos en este país por la incompetencia y corrupción moral que esta administración ha demostrado tomarán años o hasta décadas en remediar.
”Si la libertad de expresión es arrebatada”, George Washington le dijo a un grupo de oficiales militares en 1783, ”entonces seremos guiados de una manera tonta y silenciosa, como borregos al matadero”.
Es crucial prevenir que este culto se mantenga en el poder. Es esencial para el futuro del país y, tal vez, del mundo vencer a los seguidores de esta administración extremadamente peligrosa en todas las elecciones sin excepción hasta que el país regrese a la decencia y a ser la Guía de la Democracia en el Mundo.
¡Votemos este noviembre y ”Hagamos a América sensata otra vez”!