Lucero Delgadillo me servía café en cafetería del hotel Araiza en Mexicali, joven mujer con opinión, le dije: oiga este paquete de mantequilla no abre, batallamos pero abrió, y le apunté ya debemos cambiar a mejor calidad, me reviró: mucho, casi todo en México.
La siempre triste realidad sobre todo en la frontera del Norte de México está siempre, y es que un día antes en Las Vegas o en San Diego para el caso, la calidad de productos, de infraestructura urbana y el ingreso de sueldos están muy lejanos de ser igual.
Donald Trump fue de los primeros mandatarios que felicitaron al virtual presidente electo de Mexico y después por media hora hablaron por teléfono, positivo paso en un fresco reinicio de relaciones entre Estados Unidos y México.
Recordar el libro ‘Vecinos Distantes’ me lleva a proponer que esta relación será positiva, desde luego habrá diferencias pero algo que comenté antes en esta columna... AMLO puede -y debemos apoyarlo- ser el mejor presidente de la historia de México.
Recuerdo mi encuentro con la hoy virtual Ministra de Economía de México, Doctora en economía Graciela Márquez Colín, no me tienes convencer, me dijo, la relación con Estados Unidos es clave para México.
Nuestra tierra tiene suficiente riqueza y talento humano para retener familias en México y si emigran que sea por opción no por necesidad, dijo AMLO.
Hoy,vean como la presión de Trump en contra, no de los mexicanos o de México, sino contra el sistema corrupto al final del día, favoreció el cambio en México.
Tiene razón Lucero, el cambio político inicia con uno y hoy ése cambio será actuar apoyando al nuevo presidente de México allá está, aquí al presidente Trump.
Ánimo
Xavier@rivas.com