El titular del Sindicato de Árbitros Deportivos de Argentina, Guillermo Marconi, reveló que están analizando la posibilidad de suspender partidos de futbol en los que el público insulte al presidente Mauricio Macri.
La drástica medida sería la respuesta al creciente descontento contra Macri que, en las canchas, se ha traducido en recurrentes y masivos cantos con insultos incluidos.
Marconi explicó que “estamos viendo la cuestión legal” porque si los cantos se encuadran en un acto de discriminación el árbitro a cargo podría cancelar el partido.
Los insultos al jefe de Estado en las canchas argentinas comenzaron el pasado 4 de febrero, cuando San Lorenzo recibió y empató con Boca Juniors.
El canto masivo que se dispersó por las tribunas y se escuchó en vivo sorprendió al gobierno e incluso al mundo del futbol, ya que hasta ahora no se logra definir el motivo concreto de repudio de los fervorosos hinchas argentinos.
Los siguientes fines de semana, los insultos al presidente se repitieron en las canchas de River Plate, Huracán, Chacarita, Gimnasia, Independiente y Lanús.
En algunos medios especularon con la posibilidad de que los insultos se deban a la posible ingerencia del gobierno para que los árbitros favorezcan a Boca Juniors, el club que Macri presidió durante años y que usó como plataforma política.
Las sospechas se reforzaron luego de que el presidente recibiera en la Casa Rosada al técnico de Boca, Guillermo Barros Schelotto, quien dijo que había ido a ver a su “amigo” Macri y que ninguno de los dos tenía “nada que ocultar”. Buenos Aires (NOTIMEX)